«BENDITA MIERDA DE CORONAVIRUS, QUE APARECE JUSTO CUANDO EL REPINCHAZO DE LA REBURBUJA ERA YA INDISIMULABLE».—El coronavirus es un poderoso
catalizador del proceso de Transición Estructural del superestrangulado modelo popularcapitalista de los 1980, transición a una ya muy madura
nueva normalidad económica (cero inflación). Muchos perdedores se hacinan en los hospitales de la banca. Las UCI financieras no dan abasto. Y cada día se contabilizan más y más 'himbersores' muertos y mutilados. Pero
el popularcapitalismo lleva tiempo luchando contra su destino. Se supo sentenciado hace una década; y
en el callejón de la muerte desde 2018. Cerró filas en 2019 y ahora pretende aprovechar el coronavirus para darse
el último oxígeno a tu costa. Nunca habían estado tan vigentes las metáforas de las moscas comemierda y las ratas abandonando el barco.
La ejecución del ortograma capitalista, actualmente, requiere de grandes elementos de planificación central.
¿Qué nos dice el devenir estructural de nuestro país?:
Hitos:
— 1898: Guerra con EEUU; Pérdida de Cuba, Filipinas, Puerto Rico y Guam
— 1914-1918: Primera Guerra Mundial
— 1923-1930: Dictadura de Primo de Rivera
— 1936-1939: Guerra Civil
— 1939-1945: Segunda Guerra Mundial
— 1944: Acuerdos de Brettón Woods
— 1945-1955: 'Cuestión Española' en la ONU
— 21/07/1959: Plan de Estabilización (Devaluación; Comienzan la Inversión extranjera, el Turismo y la Emigración)
— 1964-1973: Planes de Desarrollo: I) 1964/1967; II) 1968/1971; y III) 1972/1973, inconcluso
— 1973: Crisis del Petróleo
— 20/11/1975: Muerte de Franco
— 25/10/1977: Pactos de la Moncloa
— 1985: represión de la emisión privada de activos financieros al portador y Real Decreto-Ley 'Boyer', de represión del inquilinato
— 01/01/1986: Entrada en la CE; Comienzan las ayudas europeas (FEOGA, FEDER, etc.)
— 09/11/1989: Caída del Muro de Berlín
— 1998: Ley 'Aznar', de 'urbanizabilidad' de todo suelo
— 31/12/1998: irrevocabilidad Tipo de Cambio EUR/Peseta
— 2000-2001: EUR/USD = 0,8
— 01/01/2002: Puesta en circulación de las monedas y billetes del euro
— 2008: EUR/USD = 1,6
— 09/07/2012: Memorandum de Entendimiento UE
— 2013: Ley 'Rajoy', de 'hotelización' del inquilinato
— 2016: Comienza el enfrentamiento del Reino Unido contra la UE ('brexit')
— 2017: EEUU abandona el Acuerdo de París sobre el cambio climático; Comienza el enfrentamiento de EEUU contra la Organización Mundial del Comercio
— 2018: IFRS 9, Basilea III, MiFID II, IFRS 16; Guerra Comercial de EEUU contra China
— 2020: Crac bursátil; Gran Confinamiento COVID-19; Comienza el enfrentamiento de EEUU contra la Organización Mundial de la Salud Los ortogramas existen aunque no se quiera. Del mismo modo que tu mano se quema si no la retiras del fuego. La historia tiene leyes objetivas. No se escribe por un puñado de
pastores, como creen los
borregos. De ninguna crisis o recrisis se sale cambiando a fulanito por menganito.
Aquí, en este blog, somos muy buenos desentrañando el
ortograma capitalista.
A mediados de los 1980, tras el
triunfo del antiinflacionismo —congelación de rentas salariales incluida—, en los países con sistema capitalista se inició una pandemia anticapitalista: la
sobrevaloración de la vivienda básica de los asalariados y el correlativo
superendeudamiento (traída masiva de rentas salariales del futuro). La ideología de acompañamiento fue el
falsoliberalismo neoliberal y su
Cultura del 'Real Estate', que predicaron la presunta sublimación del asalariado en pequeño propietario. Y comenzó el manoseo del término popular, que hasta entonces había sido un antónimo de capitalismo. Así, cayó el
Muro de Berlín de la República Democrática Alemana (1989); se disolvió la
Unió de Repúblicas Socialistas Soviéticas (1991); y se precipitaron cambios socioeconómicos en la República Popular China, con la
Revuelta de Tiananmén (1989).
El Capitalismo Popular de los 1980 no lo inventó ninguno de los primeros ministros que administraron su eclosión (Tatcher, Reagan, Pinochet, Kohl, Miterrand, Felipe González, Nakasone, todos creyentes del popularcapitalismo), sino la Segunda Internacional en los 1910, oponiéndose al mero Estado del Bienestar bismarckiano y mientras echaba de su seno a los comunistas.
A mediados de los 2000, el
sistema de ecuaciones que es el capitalismo dijo basta y comenzó el obvio proceso de ajuste en búsqueda de un
nuevo equilibrio. La cosa no gustó nada ni a los
obreros-propietarios, especialmente a su élite de
trabajadores-directivos superasalariados, ni a las 'superinmobiliarizados'
intelectuales y profesionales, artistas y deportistas. Resentidísimos, se echaron al monte y parieron
el populismo, ya en la derecha, ya en las izquierdas, patético reproche de
Fausto: «¿Cómo has podido hacerme esto a mí, Mefistófeles?». Sus cerebros no pueden soportar el dolor que les causa no solo haber perdido su propia vida, sino haber
masacrado a sus propios hijos. Los más hoy solo dedican su tiempo a hablar mal de los políticos, culpándoles de la Destrucción —hipócrita victimismo exculpatorio—.
Desafortunadamente, esas
fuerzas del Trabajo y de la Cultura desfiguradas por el popularcapitalismo poseen una poderosa arma de destrucción masiva:
el voto antisistema, pero no revolucionario, sino para que nada cambie y el futuro distópico, en efecto, acabe siendo el que ellos han hecho descontar a sus hijos —cfr. la filosofía del presente especulativo—.
En 2020 el ajuste estaba muy avanzado, como veníamos relatando en 'Transición Estructural Net', en contra de la 'main stream' de comunicadores —ganchos del timo—, siempre tergiversando. Pero, de golpe, la crisis sanitaria por el coronavirus ha acelerado el cambio en la definición de los escenarios de Prospectiva. Veamos.
Prospectiva actual del ortograma en España:
— Los dos escenarios extremos:
A)
Ejecución limpia del ortograma
D)
Oposición al ortograma
— Los dos escenarios intermedios:
B)
Ejecución sucia del ortograma
C)
Indiferencia ante el ortograma
En nuestra modesta opinión,
España está ahora en el escenario B), pero llegará a estar en el A) conforme nos vayamos metiendo en lo que llamarán crisis pero que no será nada más que la recrisis estructural final del modelito popularcapitalista de los 1980: la aparente inflamación que es toda cicatrización.
En estas circunstancias, es obligatorio ser
duros contra el 'rerrecuperandismo' —vuelta a la pandemia del 'todos capitalistitas'—. En este sentido, estamos muy contentos de
que se hable de reconstrucción —implica previa destrucción— y
no de recuperación. Ha cundido, felizmente, que «ya nada será igual que antes».
La pena que están dando los
«pobreticos pequeños propietarios» no nos conmueve. Que les den. Lo que nos preocupa es que signifique que la banca no esté tan desaguada de basura inmobiliaria como oficialmente dice estar. Porque lo lógico es pensar que,
si la defensa de los intereses de los pequeños propietarios está en la agenda del Gobierno, es porque forma parte del escudo de la banca, ¿o no? En cualquier caso, que se les eche un capote no significa que tengan que volver las añagazas roñosas para intentar eludir la inevitable inhumación del popularcapitalismo. En este sentido,
ha perdido el sentido la política económica de Muro & Arancel de EEUU y Reino Unido, y, en general, todo independentismo económico de hermano rico, desde el neoprovincianismo vasco y catalán hasta la manipulación en las disoluciones de las comunidades hereditarias, expresión esta la más mezquina de la pisitofilia, tan en boga últimamente en España, como hemos constatado los profesionales de la materia.
Recordemos aquí la
toxicidad de la Cultura del 'Real Estate', núcleo duro del falsoliberal-neoliberalismo, ideología del popularcapitalismo:
•
pisitofilia y creditofagia: odia al dinero y endéudate;
•
'leydeofertademandismo': acaparar y racionar enriquece; y
•
rentismo parasitario del Trabajo & Empresa: trabajar o emprender empobrece.
En estos primeros días de la fase final del proceso de Transición Estructural 2025 —catalizado por la Crisis Sanitaria—,
al ortograma no le está siendo fácil abrirse paso, en unos sitios peor que en otros. La causa última está en la
resistencia irracional que está oponiendo la autoridad fiscal de EEUU, soportada por la peor mayoría natural electoral de capitalistitas del mundo, encima, armados con rifles. Ello es independiente de que EEUU quiera o no doblar la cerviz ante la evidencia del fenómeno principal de su
pérdida del protagonismo en el mundo en favor de China; como se ve en epifenómenos tales como los futuros negativos del petróleo WTI —los operadores financieros, pagando dólares por deshacerse de su derecho a comprar petróleo norteamericano a un mes vista— y, sobre todo,
la impotencia de EEUU para inflacionar su economía lo más mínimo, plasmada en la caída general del rendimiento de su deuda pública y en la enfermiza sobrevaloración del dólar, demandado para liquidar activos financieros basura denominados o anclados a él.
No ayuda que el actual Presidente de EEUU, 'supermegahiperpisitófilocreditófago' que se cree superior y a quien no le importa desagradar, se presente a su
reelección el próximo 3 de noviembre a sabiendas de que ya es el chivo expiatorio mundial, no solo nacional. No es tan listo como parece.
Tampoco ayuda que se agote el 30 de junio el plazo para decidir si el
periodo transitorio del 'brexit' se prorroga más allá del 31 de diciembre. No se ha hecho nada al respecto, lo que hace más que probable que se posponga la decisión, aumentando la incertidumbre sobre la participación de Reino Unido en las políticas de Rerrescate-UE.
El ortograma dicta que no acabe habiendo 'brexit'. Si lo hubiera, es fácil imaginar la 'longa noite de pedra' que espera al Reino Unido en el s. XXI, máxime con lo cerca que está su anciana Reina a su encuentro con el barquero de Hades —y lo cerca que ha estado de su primer ministro de que le pongan el óbolo en los ojos, habiendo pasado el coronavirus en cuidados intensivos, 'memento mori' que alguna secuela física o psíquica le habrá dejado—.
Cuanta más suciedad haya en la ejecución del ortograma, peor será el estado en que estaremos cuando el nuevo modelo Era Cero (cero inflación y dinero fortísimo) vuele en solitario a mediados de década, libre ya de fantasías animadas de ayer y hoy de que todos somos capitalistitas interactuando en mercadillos hipotéticamente mal intervenidos por burócratas.
Para los
hidalgos de caldo claro es especialmente duro saber que son y serán
donnadies 'per secula seculorum'. Que les den. No nos dan ninguna pena después de la sordidez que ha exhibido desde 2013 hasta 2018 con:
— la precarización laboral,
— la hotelización del inquilinato y
— el agotamiento de la capacidad de endeudamiento público uniéndose a al supermegahiperendeudamiento de familias y empresas (estrangulamiento financiero total final).
Ahora, hagamos un breve repaso al
estado de ejecución del ortograma en España, según el Enfoque de la Renta:
A) RENTAS PRODUCTIVAS
— TRABAJO & EMPRESA
• La
caída del volumen de rentas salariales está siendo épica. Y más que va a ser conforme se cronifique la herida sangrante del Turismo, la Hostelería y la Restauración.
• Nos ha gustado la desvergüenza con que, primero,
se ha proclamado que las rentas salariales son primarias-originarias respecto del rentismo parasitario inmobiliario —que es primario-derivado—; segundo, cómo para preservar este,
se obliga a los bichos a traerse del futuro sus rentas salariales (ahora entendemos qué quiso decir el Presidente del Gobierno cuando, al presentar el Estado de Alarma, pidió un esfuerzo a los inquilinos); y, por último, cómo
esta cuestión de la preservación del exprimeinquilinato, es la única en que no ha dicho ni mu la oposición política, a pesar de su estrategia de bronca carroñera (que nos viene fenomenal a los estructuraltransicionistas, no solo porque apuntala al Gobierno más repincharreburbujista de los posibles, sino porque lo peor sería que se pusieran de acuerdo en unos Pactos de la Moncloa 'rerrecuperandistas', es decir, de resucitación del modelo en una nueva Rerreburbuja, en contra del ortograma y, por supuesto, del Rerrescate-UE).
• Afinemos el oído.
Escuchamos Reconstrucción, pero lo que dicen es Re-Construcción. Algunos lo dicen con impudicia:
https://www.eldiario.es/madrid/Ayuso-Gabilondo-liberar-construccion-vivienda_0_1020148178.html«El líder del PSOE madrileño, Ángel Gabilondo, en la oposición, ha ofrecido un pacto para la reconstrucción. Ayuso, del PP, en el poder, responde que la salida de la crisis pasa por 'liberar suelo' para la construcción y no limitar el precio de la vivienda: 'Para que esto salga adelante y se recupere lo antes posible hace falta quitarse las vendas y los dogmas ideológicos y permitir que la colaboración público-privada siga creciendo'».
Colaboración público-privada ha existido siempre. Esa es la esencia del sistema capitalista. ¿A qué se refieren? No tenemos dudas. Se refieren a que tú, contribuyente, pongas dinero para una nueva era 'redorada'.
Se trata de
absorber desempleados provenientes del Turismo, la Hostelería y la Restauración. A punto de nacer el popularcapitalismo, en el primer tercio de los 1980, el señuelo fueron los famosos 800.000 puestos de trabajo que la socialdemocracia prometió para absorber el desempleo por la transición estructural que se vivía entonces (Reconversión industrial). Pedía que votaras para elegirla a ella como administradora única de la Burbuja que ya se venía venir en todos los países capitalistas. Evidentemente, los 800.000 puestos de trabajo fueron creados en la Construcción, para lo que hubo de recanalizar el ahorro materializado en dinero negro desde los mercados financieros, entonces muy opacos, hacia ella —particularmente, bastó liberalizar el inquilinato y prohibir 'de facto' la emisión de activos financieros al portador, dándole al Estado el monopolio de colocación del dinero negro, v. Ley de Activos Financieros y 'Decreto-Ley Boyer' de liberalización de la LAU a mediados de los 1980—. Hoy la situación es infinitamente más complicada. Si fallara la financiación proveniente de la UE, una de dos, o hay una represión brutal de todos los rentismos parasitarios o, si no, habrá que meter mano a los depósitos contabilizados en los Balances del sistema financiero español.
• La base imponible del
Impuesto sobre el Valor Añadido son los precios que constan en las facturas. Se podría decir que no grava el Valor. No es así. Grava el Valor a través de cada aproximación que hacen al mismo los operadores económicos. Con los
derechos de importación pasa lo mismo. En el
IRPF, cuando se gravan los pelotazos inmobiliarios también se diría que se confunde Valor con precios: a la renta que se obtiene la llama ganancia patrimonial' y años atrás la llamó incremento de valor y plusvalía. Pero el Estado no promueve la confusión entre Valor y precios, aunque se aproveche de ella. Solo incurre en
un pecado venial que ha sido aprovechado indecentemente por los usureros inmobiliarios bajo el modelo popularcapitalista.
Pero
añadir valor es algo propio de toda actividad humana. Es consecuencia o forma parte de la
'poiesis' consustancial al ser humano. Hace años se puso de moda hablar de
la excelencia. Es la misma idea. En el tardopopularcapitalismo, ni valor ni 'poiesis' ni excelencia ni leches: 'valor' es igual a más precio. El peligro ahora consiste en decir la idiotez de que «hay que estimular las actividades de mayor valor añadido».
Todas las actividades son buenas para añadir valor. Podemos empezar por mejorar la mierda de parque inmobiliario carísimo que nos posee, que salta a la vista cuando un viaja a Portugal y a Francia, nuestros vecinos. Seamos mejores todos, siempre y en todo lugar, hasta en la actividad más modesta.
• No importa que ahora se estimule la construcción financiada por ti, contribuyente o ahorrador. Lo importante es
que no se construyan mierdas carísimas —a que sean caras, bien que nos hemos apuntado—.
•
Pan y circo: que vuelva el fútbol, siempre que no sea mientras se intenta 'rerresucitar' el modelo popularcapitalista, sino
mientras o nos esforzamos en la Reconstrucción auténtica, es decir, en el desarrollo del nuevo modelo cuya base es que
el dinero es fortísimo —que, en la eurozona, lo va a ser quieran o no los 'himbersores', no así en EEUU, donde el dólar tiene pendiente una depreciación histórica, pero eso será cuando 'reestalle' allí la reburbuja, que queremos que sea con Trump como chivo expiatorio, para que a todos se les quite de la cabeza la gana de ser poseídos por más magnates inmobiliarios—.
B) RENTAS APRODUCTIVAS
La caída de la actividad y el empleo (Producción) se traduce directamente en una caída de las rentas el Trabajo & Empresa, obligando a ajustar por doble vía:
a)
complementar la Renta con deuda, preferiblemente interna,
y con transferencias sin contrapartida de la UE, permaneciendo virgen el ahorro financiero en depósitos bancarios, a movilizar solo en los activos financieros de la Reconstrucción—; y
b)
represión de toda renta aproductiva, pero especialmente las inmobiliarias, toda vez que la mayor capacidad económica que tenemos está en lo inmobiliario, aparte de que la 'aportabilidad' de las pensiones al ajuste es limitada y la del rentismo financiero prácticamente nula, máxime con el art. 135 de la Constitución por medio.
— RENTAS INMOBILIARIAS
• El Real Decreto-Ley 11/2020 pasará a la historia de la
ignominia económica española por las siguientes frases:
«En primer lugar, se adoptan medidas dirigidas al apoyo al alquiler de personas vulnerables. En España, en el 85% de los arrendamientos de vivienda, el propietario es [pobretico] una persona física pequeño propietario... de hasta diez inmuebles urbanos, excluyendo garajes y trasteros, o una superficie construida de más de 1.500 m2».
Lo peor no es la obscenidad en la quiebra del principio de proporcionalidad económica. Todo el mundo sabe que 10 pisitos es un patrimonio muy importante incluso con la burbuja/reburbuja pinchada/repinchada. Es una feísima regla de proporción, establecida por un Gobierno de izquierdas vergonzantes, que no se la hubiera podido permitir un Gobierno estándar de la derecha —
la socialdemocracia definida, ahora dotada de una 'Geheime Staatspolizei' zarrapastrosa, por enésima vez, practicando aquello para lo que se la paga: enervar el revolucionarismo de la clase trabajadora—.
Lo peor de este infamante Real Decreto-Ley es la frase «en primer lugar». Es decir, que preservar el exprimeinquilinato va antes que cualquier otra cosa, siempre secundaria, como por ejemplo el apoyo a la industrialización, que se cita literalmente en la norma.
¿Por qué, ante la cesación de la actividad económica productiva (Trabajo & Empresa), se ha decidido que la prioridad era preservar
el rentismo inmobiliario, aún sin 'desreburbujear' desde la infame LAU-2013 de hotelización del inquilinato; encima, a sabiendas de que
un casero buen padre de familia jamás necesita estas rentas para subsistir? ¿Por qué la primera decisión de política de rentas que se toma es tan alucinantemente cabrona? ¿No será porque los alquileres, que salen de las rentas salariales —contratar un obrero es casarte con su casero—, hacen falta para honrar préstamos de la banca —y los de la banca misma—? ¿No será, también, para
tranquilizar a las ratas, por el miedo a un masivo abandono del barco, unido a que el riesgo de 'himbersores', socimis y fondos buitre, en realidad, nunca habría salido del perímetro de consolidación económica —que no meramente contable— de la banca? ¿Qué estaría revelándose de verdad con tanto «pobretico pequeño propietario»?
Los ganchos del timo inmobiliario ya han hecho público que tienen
capacidad económica de sobra para posponer la obtención de rentas inmobiliarias vía venta y ningún tramo de las rentas del exprimeinquilinato son necesarias para subsistir. La
política fiscal está clara:
a) modifiquemos la tributación de las ganancias patrimoniales inmobiliarias de modo
que desaparezcan las ventas que no funcionen como sustitutivo del alquiler y, por contra, en relación con estas, lenidad total; y
b)
pongamos a tributar los alquileres como si se tratara de rentas de una actividad económica normal, dejándonos de tanta blandenguería.
Dicho de otra forma, impidamos que subir los alquileres sea lo más racional del mundo. Porque idiotamente lo es más que nunca. Primero, respecto de los exprimeinquilinos, para aprovecharse de la política presupuestaria mamporrera de ayudas al inquilinato —mamporrero: quien guía el miembro del caballo en el acto de cubrir a la yegua—. Y, en segundo lugar, respecto de los buitres que lo que quieren es vender, coger el dinero y salir corriendo, porque los alquileres inasumibles fuerzan a todos a comprar.
• La
diecisieteporcentualización funciona en los dos sentidos. El sector inmobiliario solo entiende de 17 por cientos para
pastorear las expectativas de quienes han de poner o pagar precios. Los ganchos andan explorando
qué nivel de rebajas es el mejor para atraer a las moscas comemierda cuando cese el Gran Confinamiento pero siga la pandemia de coronavirus. El periódico Expansión tanteó la semana antepasada una escenario central de rebajas el
-25% (-44% en Andalucía). La semana pasada se ha hecho posibilista. Se ha moderado y, abracadabra, ha salido con un
-16,7% (subliminalmente, 16 o 17%).
En toda burbuja, las caídas de precios acaban siendo más o menos el triple de las rebajitas que inicialmente se anuncian cuando los usureros le ven las orejas al lobo y doblan un tímidamente la cerviz.
Que la unidad de medida de la nueva normalidad de catálogo de precios políticos inmobiliarios sea del 16,7% es perfecto para nuestros intereses. Pero los que no bebemos lejía cuando el magnate inmobiliario sale por televisión diciendo que tomarla te limpia de coronavirus,
estamos obligados a pensar que el sector está manejando una caída final del triple de la rebaja inicial, es decir, una caída del -50% (-16,7 X 3).
En suma, en el Repinchazo de la Reburbuja, el nivel de precios inmobiliarios va a llegar a
la mitad de lo que es ahora; exactamente lo mismo que aconteció hace una década en el Pinchazo de la Burbuja, con una diferencia fundamental:
ahora, la banca no está secuestrada por los usureros inmobiliarios al mismo nivel de asfixia que lo estaba. Tienen pues razón los ganchos cuando dicen que «esta vez no será como fue hace una década», je, je.
• Finalmente,
nos han engañado con la Sareb. Creímos que el Real Decreto-ley 6/2020 era sincero cuando, en su preámbulo, decía que era necesario retocar su régimen jurídico «con el fin de que SAREB prosiga llevando a cabo su fundamental labor liquidatoria con normalidad». También creímos sincera la web de La Moncloa donde se lee que este Real Decreto-ley «permitirá que SAREB continúe con sus funciones con normalidad hasta el fin de su mandato, en 2027, contribuyendo a la maximización del valor de la venta de la cartera de activos que recibió en 2012». Nos han engañado, aunque el engaño ha durado apenas unos días, como hemos ido comentando aquí.
No se ha reprogramado la Sareb para que pase de fondo congelador a fondo liquidador, sino que se ha optado por una patada para adelante. «La Sareb, sin cambios», como hemos escuchado estos días. Es decir, que no solo no deja de ser un fondo congelador, sino que
la intención inicial es que se sea el gran fondo recongelador del siglo XXI, eso sí, legitimado por la dación de unos cuanto miserables miles de viviendas para «fines sociales». Ya veremos si este segundo
componente social no
desencadena de golpe la descongelación cuando se tome conciencia de la inflexión que ha habido en el proceso de Transición Estructural y se revele que
la vivienda básica tiene que ser de provisión pública por mera supervivencia del sistema.
— PENSIONES Y SUBSIDIOS
• Yerran quienes dicen que no tiene nada que ver con la crisis sanitaria la integración de la gestión —no del régimen— de 'Clases Pasivas' (pensionistas funcionarios) en la Seguridad Social, abandonando su sede natural, Hacienda (Real Decreto-ley 15/2020). A partir de ahora, los funcionarios d la Seguridad Social van a ver cuán 'de lujo' son las pensiones de los funcionarios, para poder planificar el recorte al que estaremos obligados con el Rerrescate-UE.
Estamos ante un primera paso ineludible del Pensionazo, de preparación del terreno de juego.
La intensidad y profundidad del Pensionazo es inversamente proporcional a la del Ladrillazo —rentismo inmobiliario— en relación con el ajuste del coronavirus. Y, por ahora, se diría que ha querido dejarse claro qué va «en primer lugar». Pero, en Política, lo que se ve puede ser lo contrario de lo que es. Nosotros siempre hemos dicho que el dilema de verdad era Pisito o Pensiones. La balanza, por ahora, se diría inclinada del lado de Hala-A-Pagar.
— RENTAS FINANCIERAS
• El rentismo financiero no es procapitalista. Es anticapitalista. Es más, mucho capitalista simula ser prestamista de su empresa porque el popularcapitalismo es anticapitalista: castiga fiscalmente más los dividendos que los intereses (subcapitalización).
El Capital, que da nombre al capitalismo, son los Recursos Propios, no los Recursos Ajenos. Admitimos los Recursos verdaderamente Ajenos, cual pulpo como animal de compañía, en la medida que nos ayudan a engordar los Recursos Propios. En la situación extrema actual, en engorde de Recursos Propios no va a tener esta función de 'leverage' (apalancamiento) sino de
complementación de la depleción de Renta provocada por el parón de la Producción. Por eso la mafia se hincha a dar préstamos a los pequeños comercios en apuros.
El rentismo financiero ya fue felizmente reprimido hace una década. No hay nada que rascar aquí, salvo intentar
minimizar la deuda externa, para lo que habrá que estimular la interna, particularmente emisión de
bonos de reconstrucción.
Y, por último, es obligatorio recordar que
no va a haber ni quitas ni 'reset' ni 'default' ni 'a la argentina' ni 'a la griega' ni leches. Va a haber euro, la moneda más fuerte del mundo en la Era Cero, con permiso de la República Popular China. Aquí
se va a honrar hasta el último céntimo, aunque se tarde un siglo.
C) TRANSFERENCIAS SIN CONTRAPARTIDA
— INTERNACIONALES
• Todo lo que venga de la UE sin contrapartida será una bendición. Se empleará en pagar pensiones y subsidios, como la renta mínima vital, pero
el Rerrescate impondrá el recorte de las rentas asistenciales. Además,
la transferencia no será mucha, entre otras cosas, porque el Reino Unido no va a pagar su cheque separatista —para mayor regocijo antieuropeísta de inspiración norteamericana— y por las necesidades de Renta de todos los Estados miembros de la UE, entre los que no solo se encuentra Italia, sino también Francia.
— NACIONALES
•
El dinero que los españoles tienen depositado en los bancos nacionales es sagrado. No se puede expropiar ni un céntimo. Si están pensando en la Tasa Tobin, que afecte solo al dinero que muevan las operaciones inmobiliarias. Esto no quiere decir que no vaya a haber alguna operación tipo Cajamadrid o Banco Popular para rematar la preparación del sistema bancario cara la Era Cero. En este caso, que afecte solo a accionistas y bonistas, nunca a depositantes.
•
No debe haber rescate alguno de entidades o instituciones de la banca en la sombra. Es fundamental para el ajuste y para ello nos hemos estado preparando a la banca al sol. No tiene ningún sentido haber creado cortafuegos para que, cuando llega el incendio, desperdiciáramos el agua en ellos. Esta vez, los 'himbersores' no tienen excusa alguna: tras el 'estallido de la burbuja', como oficialmente se conoce, todos sabían donde se metían. Ni 'culpa in vigilando' ni leches. Que se jodan todas las sociedades de inversión y fondos, etcétera que tengan problemas de liquidez. Precisamente, esta es la gran red de seguridad esta vez. Es más, lo que toca es
impedir los reembolsos de todo lo que no sea la banca al sol.
D) DEUDA
— EXTERNA
•
Que la deuda externa sea mínima. Pero, si no hay más remedio, que sea
solo del Estado con la UE.
— INTERNA
•
Deuda pública de reconstrucción bien retribuida... ¡y a volar!
Una depresión es una recesión cronificada. No saldremos de ella hasta que no nos atrevamos a
reprimir los rentismos con mayor injusticia conmutativa, a los que llamamos 'Private Taxation'. Todo el mundo sabe que lo inmobiliario está desmadrado. Todo el mundo sabe que los alquileres salen de exprimir rentas salariales. Todo el mundo sabe que contratar un obrero es casarte con su casero. Pero sabiéndose lo que se sabe,
¿por qué el Gobierno cínicamente ha preservado el exprimeinquilinato «en primer lugar», con la complicidad de la oposición, en contra del dictado del ortograma capitalista?