EJE DE "VALOR DEL DINERO".
Como podéis observar, directamente niego la mayor. Normalmente este eje se plantea desde el punto de vista del precio de bienes y servicios. En la situación actual sostengo que no varía el precio, lo que varía es la capacidad adquisitiva del dinero. El valor o poder de compra del dinero. El precio, en todo caso, sirve de instrumento para que los intervencionistas tengan otro punto de apoyo para arrastrar ese poder de compra en un sentido u otro (es otra forma de manipulación).
INFLACIÓN ALTA.
Definida esta como una inflación superior a la habitual (que no normal). Sin entrar a considerar que el IPC es otro instrumento de propaganda y como tal un engaño, todo lo que supere la tasa de IPC acostumbrada.
El modus operandi más sencillo es "imprimir dinero" o "inyectar dinero" o "facilitar cuantitativamente". Sea este virtual o de papel, al haber más dinero para adquirir los mismos bienes o servicios, el dinero pierde valor mientras en teoría las deudas referenciadas a esa valoración dineraria también disminuyen. Digo en teoría porque para que eso se produzca primero tiene que traducirse la subida del IPC a los salarios. Sin embargo en España ese mecanismo de recuperación del poder adquisitivo de los trabajadores se perdió con el anterior desgobierno que introdujo en el debate una antigua reclamación de la patronal: desligar las subidas salariales del IPC. Por tanto en el escenario actual es falaz que la inflación se compense en los salarios. De hecho, vivimos todo lo contrario ahora mismo (ver más adelante).
Actualmente solo hay dos caminos para que España pueda inflacionar fuertemente, a mi modo de ver: que sea Europa (y quien dice Europa dice Alemania) quien inflacione fuerte o que España se salga previamente del euro. Recuperando la llamada "soberanía económica" (¿soberanía en manos de quién? ¿la castuza?)
Para que se escoja el camino de la inflación alta Aleman... digo Europa debe verse acorralada ante unos morosos con deudas impagables en euros.
Cabe la opción de que la inflación no sea escogida sino obligada: que sea por arrastre del dólar. Este escenario a medio plazo se me antoja muy probable. Si el dólar inflaciona mucho o incluso hiperinflaciona el euro (y casi todas las monedas mundiales) se verán obligadas a seguir en mayor o menor medida al dólar. Es más complejo de desarrollar y si interesa especialmente a alguien que lo cuestione. Básicamente se debe a que sea moneda de reserva, al binomio petrodólar, a que todo el mundo tenga deuda USAna y a que todo el mundo quiere, por todo lo anterior, vender a USA.
Por ahora y atendiendo a lo que dicen los
ppcc USA se está quedando toda la inflación para sí. Entiendo que básicamente porque puede dado que (aún) es moneda de reserva.
En cualquier caso la inflación lo que hace es que los precios suben aparentemente, o visto desde otro modo, la moneda se devalúa. Por tanto, los vehículos de ahorro (que no inversión, aquí solo pretendemos protegernos del expolio, no ser inversores que eso nos queda grandes) deben ser aquellos capaces de CONSERVAR el valor.
El
ladrillo.
Tradicionalmente en España, de amplia tradición inflacionista pesetil, se ha recurrido al
ladrillo. Aunque el valor del dinero se evapore, un pisito siempre estará ahí ¿no? Además, el "ahorro" en ladrillo se hacía deuda mediante, considerando el pago de la renta del alquiler del dinero como preferible al de la renta del bien en sí. Es el fundamento del manido mantra "
al principio cuesta pero después no te enteras" cuando ese "ahorro" se hacía mediante la deuda. La deuda se la comía la inflación de dos dígitos porque los salarios se indexaban a esa inflación. Hoy eso es falaz en tanto que si sube la inflación pero se acompaña de subidas de salarios, nos encontramos que el mantra pepitil se vuelve falso: al principio cuesta y después cuesta más, porque al no subir el sueldo pero sí los precios de las necesidades básicas, el margen de ingreso destinable a pagar hipoteca es aún más estrecho. No se puede destinar dinero a pagar la deuda porque no hay dinero más que para vivir.
Por último, actualmente los tipos de interés de casi todas las hipotecas son variables y conforme aumentase la inflación se revisarían al alza (y el tipo de interés compuesto es la mayor arma de destrucción masiva imaginable, amiguitos). Porque
la banca siempre gana en este casino (por mucho que nos joda). Solo los techos de tipo pueden salvar a los
pepitos en ese caso y solo de forma parcial.
Otro factor a tener en cuenta es que el ladrillo es un bien poco líquido, más aún en un entorno de caída de precios donde solo se puede vender a la baja. Por tanto el dinero que se decidiese destinar a este debería ser un dinero prescindible. En caso de necesitar un retorno periódico para vivir de él solo me planteo dos opciones: que anule un gasto (de alquiler, por ejemplo) o que se pueda poner a rentar a su vez (alquilándolo). Es necesario hacer muchas cuentas y comprobar la tasa de retorno y el PER del inmueble en este caso, pero siempre teniendo en cuenta que el mercado va a seguir bajando unos años y en el más optimista de los casos se estancará después otros muchos más (pirámide poblacional
dixit).
Por tanto, salvo que alguien tenga capacidad para comprar a tocateja el ladrillo no es una buena inversión comprar en un escenario de inflación como el actual (que realmente es estanflación, como veremos más adelante) que es diferente de otros episodios de inflación. Adicionalmente el ladrillo está en la actualidad en fase de bajada explosiva, lo cual lo hace en cualquier caso desaconsejable en este momento por sí mismo (esto lo veremos al definir con más detalle la biflación): no coger el cuchillo que cae.
Descartado el dinero, descartados los pisitos. Sigamos con otros bienes que se defienden más o menos bien contra la inflación.
Metales preciosos.
Los metales preciosos no se revalorizan realmente durante la inflación. Realmente lo único que hacen es mantener su precio de forma objetiva y es el dinero el que pierde valor de forma relativa. Cuando uno de estos metales "gana valor neto" es resultado de que se está especulando con él. La gente lo adquiere con unas pretensiones desmedidas. Por tanto, se corre el riesgo de que se monte otra burbuja y que nos estalle en la cara. La clave de todo está en cuando entrar y no hacerlo en la cresta de la ola. Hay quien no entra ahora en oro justo porque piensa que el precio actual es desorbitado, con lo que el margen de mejora es residual. Además esto mismo aumenta las probabilidades de que se derrumbe (como ya no sirve para especular se corta la especulación que lo mantiene artificiosamente alto y esto lo desploma). A los que entran a tiempo les da igual que haya burbuja. O incluso les beneficia, porque a medio camino han podido vender una parte de lo burbujeado, compensar los costes iniciales y aún así conservar una parte. Visto así el oro es una gran inversión contra la inflación, pero hay que valorar si "aún estamos a tiempo".
Los metales preciosos tiene una ventaja adicional y es que son universales, en el sentido de que las inflaciones desmesuradas en otros lugares (USA) pueden beneficiar el precio en todo el mundo, sin que necesariamente haya tanta inflación en esas otras partes que se benefician de ello.
Como resguardo lo interesante es tener oro físico más que en papel o electrónico. En según que escenarios los papelitos de "te debo oro" pueden valer lo mismo que los papelitos de colores conocidos como billetes, a.k.a. confeti.
Pero tener oro físico conlleva riesgos:
- robo en el lugar donde se guarda como principal riesgo y costes para su mantenimiento seguro (consigna en una caja de un banco en torno a los ciento y pico euros anuales)
- confiscaciones estatales (incluso aperturas de cajas en bancos) que se han producido en momentos puntuales de la historia, como riesgo más remoto.
Otras ventajas serían su (relativamente) fácil portabilidad en caso de tener que salir por patas del país.
De todo lo dicho para el oro la plata es igual pero a niveles mucho más modestos y moderados, pues es mucho menos volátil (para lo bueno y lo malo) y con el inconveniente de que requiere una masa y volumen mucho mayores (más difícil de guardar y casi nula portabilidad). La ventaja era (recalco el era) que se podían encontrar monedas de plata de curso legal, pero que actualmente escasean, los famosos karlillos de 12€ y 20€. Este año han sacado el K30€.
Otra virtud de los metales es que conservan su poder de compra de forma más o menos independiente de la moneda nacional en curso, cosa que veremos más adelante puede ser interesante.
[Lo dejo por hoy porque la siguientes es de las más variadas de tratar: la divisa extranjera estable].
[Edito para añadir sobre metales en papel]
Otro modo de hacerse con metales es mediante ETFs (fondos cotizados) sobre el metal en cuestión.
http://es.wikipedia.org/wiki/Fondos_cotizadosUn forero aportó lo siguiente:
http://www.morningstar.es/es/snapshot/snapshot.aspx?id=0P0000KYCE&ClientFund=0&LanguageId=es-ES&CurrencyId=EUR&UniverseId=UNIVE$$ALL&BaseCurrencyId=USDNo entiendo nada del tema así que cualquiera que sepa más podría aprovechar y añadir algo de luz.
Añado también que hay acciones de empresas mineras. Si el oro sube, sus acciones también, aunque eso entra en el terreno de las acciones que se verá más adelante.