Yo creo que asistimos al nacimiento de una democracia aparente, una especie de teatro de guiñol, cada cuatro años votamos aunque el resultado en realidad ya esta decidido porque gane quien gane las políticas que se van a realizar vienen impuestas desde otro lado. Todo el mundo finge que esto es real, los políticos salen por la tele y actuan como si ellos realmente fueran los que cortan el bacalao y nosotros nos tomamos nuestra ración de soma y pensamos que Rajoy, Merkel, Sarkozy o el Papa de Roma solucionarán los problemas.