He estado dudando entre si colgarlo aquí o en el hilo de El fin del trabajo, pero a pesar de estar centrado en el impacto que la IA tendrá en el mercado laboral, creo que encaja mejor en este hilo.
Saludos.
Mira Marc. Uber lleva funcionando desde 2010. 13 puñeteros años. Y en mi pueblo ni está ni se le espera. Jamás veré a Uber. Los resultados de esa compañía fueron de -9.200 millones de dólares el año pasado.
Cabify sí funciona. Pero sus tarifas son peores que las del taxi. Y también pierde dinero.
Me gustaría que Marc Vidal que es una de esas mentes que entiende, acepta y abraza el futuro, me explicase cual es la magia que hace que una empresa que ha perdido 24.000 millones en tres años (y todo lo que ha perdido en los otros 10 anteriores) siga funcionando. Igual eso explica mejor el mundo que las disrupciones tecnológicas.
Bien, ahora me hablas de los robotaxis que es Uber versión 2.0 y de la AI como disruptora. Por cierto, me encanta el verbo disromper puesto que el prefijo "dis" significa contrariedad o contrario como esn disgusto (o su versión "des" en desvestir) o como en las clases de economía nos hablaban de los disbienes que son aquellas cosas de las que prefieres tener menos que más (y que por lo tanto pagas para que se las lleven).
Al grano, que me lío. La AI no es mala, dice Marc, salvo que te prepares. Ergo,
http://salvo que consumas.. Que de eso se trata todo, que carajo. ¡Qué lástima que no se pase mpt por aquí!. Porque creo que el meme de ¡Qué difícil es vender! le gustaría un montón (Como "de la petanca no se vive").
¡Qué difícil es vender, Marc!.
No tengo muy claro lo que pretendes vendernos. Parece que educación privada de esa adaptada de verdad a los cambiantes tiempos con tecnologías disruptoras. No nos dices en que consiste esa adaptación. Debe ser que las escuelas tienen que dejar de explicar lo que es un cabo o una península. O dejar de enseñar que los planetas orbitan en torno al sol o dejar de enseñar logaritmos o límites, o dejar de enseñar cosas anticuadas como qué es la rima.
Todos estos mensajes calan mucho en el pijerío mediopelista que asustado lleva a sus hijos a clase de programación. No tengo nada contra las clases de programación en sí. Programar es algo creativo e interesante. Una actividad genial para los chavales como pintar o hacer música. Lo que hago es mearme de la risa con la pequñísimo burguesía y su puto miedo a todo.
¡Qué difícil es vender, Marc!
Van a venir los okupas a quedarse con nuestras casas. Pongamos alarmas de Securitas Direct. Van a venir los disruptores a dejarnos sin empleo, consumamos algo para evitarlo.
¡Qué difícil es vender!