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¿Cotiza el bono que España crece más que Portugal con menos déficit que Francia?https://cincodias.elpais.com/opinion/2024-11-05/cotiza-el-bono-que-espana-crece-mas-que-portugal-con-menos-deficit-que-francia.htmlLa incertidumbre política, la incapacidad para atajar el gasto y la falta de reformas neutralizan el generoso crecimiento-----------
Volviendo al tema de las inundaciones catastróficas, lo que yo he escuchado en su día a un científico que hablaba del tema era el tema de los meandros y los obstáculos en los ríos, que cuanto más canalizado y recto peor, porque el agua va sin ningún tipo de freno y lo arrasa todo, mientras que cuando el río sigue el curso real, las curvas y obstáculos obligan a que baje con mucha menos energía cinética.De todas formas, cuando caen (como en Grecia hace poco) 1000l/m2 en un par de horas es imposible que eso se pueda contener. Otra cosa es que los subnormales nacionales aprovechen para hacer política con ello.La persona media infantilizada tiene la percepción totalmente falsa de que el ser humano tiene dominada a la naturaleza y de que papá tecnociencia (eso sí, sin querer saber nada del tema, que yo soy de letras) lo puede todo.
Cita de: pollo en Noviembre 05, 2024, 14:22:24 pmHasta los huevos de los cuñaos que no paran de repetir lo que les dice su cuñao o directamente gilipolleces de whatsapp.Cómo echo de menos los tiempos en los que el ignorante se callaba y se avergonzaba de lo que era, Dios.
Hasta los huevos de los cuñaos que no paran de repetir lo que les dice su cuñao o directamente gilipolleces de whatsapp.
En latín, egregius significa "notable, ilustre, excepcional". Sin embargo, es en el griego antiguo 3 donde debemos buscar la etimología y la lógica del término egregore .Esto se entiende también en έγρήγορα (égrègora), perfecto de έγείρω, levantar, despertar, despertar , como en el verbo derivado έγρηγοράω (égrègoraô), estar despierto , o el sustantivo femenino έγρήγορσις, ως (egregorsis), mirar , o los adverbios έγρήγορότως (égrègorotôs) y έγρηγορτι (égrègorti), ambos significan vigilar 4 .El término designa a los ángeles caídos (cf. Génesis VI) que codician a las “hijas de Set” en el libro de Enoc (o Enoc). Están dirigidos por Samyasa y juran dirigir sus negocios en el monte Hermón (de Anatema). Engendran a los Gigantes antes del Diluvio.El término egregore apareció en 1857 en lengua francesa de la pluma de Victor Hugo en La leyenda de los siglos (Italia - Ratbert) 5 . La amplísima difusión del poema en el siglo XIX garantiza la longevidad de la palabra, que podría haber quedado como un hapax poético hecho necesario por una rima con “mandrágora” [2] [ archivo ] .A la grafía creada por Victor Hugo se le suma la variante eggrégore , pero también encontramos grafías pseudolatinizantes como egrigor o egrigore .
Gaetan Delaforge, en la revista Gnosis, en 1987, define un egregor como una especie de mente colectiva creada cuando la gente se une conscientemente para un propósito común. El concepto ha gozado de renovada popularidad entre los practicantes de la magia del caos,[cita requerida] siguiendo el «Metabolismo Corporativo» de la serie de artículos de Paco Xander Nathan1, publicados en 2001.El resultado de una sinergia de pensamientos podría ser la descripción más concisa de este estado de ánimo.La noción de «egregor» también aparece en el libro Roza Mira, del ruso Daniil Andreyev, donde representa el brillo en la nube como el espíritu asociado con la Iglesia. En Rusia es una creencia común que la palabra «egregor» se originó de este libro espiritual.[cita requerida]
La mayor parte de la humanidad ignora el hecho de que vive y se mueve en un mundo de fantasmagoría, en el que su sentido de identidad nacional, las leyes que ha interiorizado y por las que vive, e incluso las palabras que utiliza para describirse a sí misma, están determinados. en un grado bastante sorprendente, no por ninguna consideración racional, sino por los resultados de rituales mágicos que se realizaron por primera vez en un pasado lejano y que continúan ejecutándose hoy en día. Aunque deseamos considerarnos plenamente racionales y motivados por cálculos de interés propio y por concepciones del bien individual y del bien público, es bastante difícil negar que nos enfrentamos regularmente a diversas formas de psicosis de grupo: obsesiones, fijaciones, enamoramientos, apegos emocionales, devociones… fanatismo.Negar la existencia de estas poderosas fuerzas es negar la naturaleza humana y, por tanto, la realidad. Resulta que el empirista escéptico acérrimo lidera ciegamente, incapaz de ver el terreno psicológico invisible y, sin embargo, tan importante. Y si bien la negativa a percibir y abordar correctamente las cuestiones de la psicología individual suele dar lugar a fracasos personales y tragedias menores, esa ceguera deliberada cuando se trata de la psicología de grupo puede conducir a resultados arbitrariamente horrendos.Para permitirnos percibir y comprender cosas invisibles, nos vemos obligados a conceptualizar objetos cuya existencia no puede verificarse de forma independiente sino que sólo puede inferirse a partir de sus influencias observables, del mismo modo que los físicos infieren la existencia de partículas subatómicas. Se entiende por tanto que fuera de nuestra percepción física, existen entidades artificiales generadas por la devoción, el entusiasmo o el fanatismo, tradicionalmente llamadas egregores. La palabra proviene del griego y significa “los que miran” . Los egregores son los corazones palpitantes de todas las principales corrientes de la psicología de grupos o de masas, ya sean buenas o malas.El poderoso egregore del cristianismo se identifica con títulos como Iglesia Apostólica, Jerusalén Celestial y Cuerpo de Cristo. El Islam, el taoísmo, el budismo, la masonería y el protestantismo, con todas sus sectas mayores o menores, tienen sus propios egregores. Mucha gente percibe estos egregores como puertas de entrada a algo sagrado, santo o divino, pero esto es estrictamente una cuestión de opinión. Las principales ideologías políticas también tienen sus propios egregores, que son más fácilmente identificables como de origen demoníaco, particularmente el nacionalsocialismo y el comunismo (bolchevismo, maoísmo).Ni siquiera pretenden beneficiarse de una bendición divina; entonces sólo hay demonios – creaciones de la voluntad y la imaginación humanas. Algunos especialistas en ocultismo (¡existe tal disciplina!) han teorizado que todos los egregores son demoníacos porque son proyecciones objetivadas de deseos humanos que son, por su naturaleza fundamental y caída, pecaminosos. Pero si queremos seguir siendo empíricos y escépticos para determinar la naturaleza de un egregore, debemos observar sus efectos observables:Citar Los reconocerás por sus frutos. ¿Recogemos uvas de los espinos o higos de los abrojos? Asimismo, todo buen árbol da buenos frutos, pero el árbol corrupto da malos frutos. (Mateo 7:16-20)Esta técnica funciona para egregores, jóvenes y mayores, objetivados por símbolos que van desde el crucifijo, la esvástica o la hoz y el martillo hasta varios logotipos de empresas y escudos de clubes. Verás, los egregores están en todas partes, y sospechar automáticamente de las fuerzas demoníacas en juego detrás del último video viral de TikTok (un egregore diminuto y fugaz) probablemente te haría parecer una especie de fanático.Espero que la discusión anterior haya establecido que los egregores no son imaginarios ni ficticios, sino que existen, pero no son directamente perceptibles. Quizás sea más fácil pensar en un egregore como una fuerza invisible (como la gravedad o los campos eléctricos o magnéticos) que se hace evidente por sus acciones. Es mejor evitar ser demasiado literal, pero un egregore tiene cierta apariencia de cuerpo (está investido, hasta cierto punto, de objetos físicos), una mente (representada por varios libros y escrituras, sagradas o no) y una meta ( para atender las necesidades de su comunidad). Tiene características esenciales que lo distinguen de otros egregores. Tiene una voluntad que manifiesta en tres niveles: material (controlando la conducta), psíquico (provocando estados emocionales) y mental (formando y perpetuando ideas). Se alimenta de las emociones de quienes participan en él y responde a determinadas expectativas y deseos de sus creadores y seguidores. Para seguir siendo vital y eficaz, una egregore debe retener un cierto número de miembros. La realización regular y correcta de ciertos rituales que fortalecen la unión espiritual de sus miembros es igualmente esencial para el mantenimiento de su vida física.Sin esto, un egregore se vuelve inactivo, pero no necesariamente muerto, ya que los egregore son notoriamente difíciles de matar mientras sus manifestaciones físicas e intelectuales permanezcan intactas. Esto es lo que permitió a los banderistas ucranianos reconstituir, de una manera extraña y con daño cerebral, ciertos elementos del nacionalsocialismo alemán, generando una cohorte de jóvenes fascistas ucranianos entusiastas (en su mayoría ahora muertos). Es también lo que permitió a la Federación Rusa saltarse los elementos indeseables de la experiencia soviética (mientras celebraba los elementos deseables) y volver a unir el egregore del Imperio Ruso, ganando así toda una serie no sólo de héroes, sino también de mártires y santos para sirven de inspiración y protección, ya que con ellos apareció la milenaria Iglesia Ortodoxa Rusa, la otra cabeza del águila bicéfala rusa (no me pregunten cuál).Para matar un egregore, lo más eficaz es utilizar el fuego, que generalmente se considera una fuerza purificadora. Es por eso que los libros se queman en lugar de convertirlos en abono, se usan como abono o se alimentan a las cabras, y es por eso que tradicionalmente se quema a las brujas en la hoguera. Como los egregores tienden a adherirse a ciertos edificios y sitios, estos deben ser demolidos a fondo, sin dejar piedra sobre piedra:Citar Jesús les dijo: ¿No ven todo esto? En verdad os digo que no quedará aquí piedra sobre piedra que no sea derribada. (Mateo 24:2)Puede ser igual de difícil liberarse de las garras de un poderoso egregore, purgarlo de tu mente y tu corazón. Quizás la tarea más sencilla sea expulsar a los egregores estrictamente demoníacos, pues "la luz expulsa a las tinieblas " . Esta frase es la clave en la lucha contra los demonios: una vez que se ve un demonio, es decir, una vez que se proyecta sobre él la luz de la conciencia, automáticamente queda reducido a la impotencia. En términos más generales, liberarse de la influencia de un egregore a menudo requiere mucho más que distanciarse de él y puede implicar una desprogramación completa, como es el caso de las sectas destructivas que controlan la mente. La cantidad de energía emocional, relaciones sociales, aspiraciones, valores y lazos de amistad y familiares se combinan para hacer que la extracción sea emocionalmente dolorosa y difícil. Para ello, es útil tener algo hacia lo que avanzar: se necesita un plan, un nuevo propósito y una fuente de significado para llenar el vacío social y emocional. Dependiendo del nivel de implicación, podría ser un acontecimiento significativo que cambie la vida, como adaptarse a la vida después del final de una carrera, afrontar la muerte de una pareja o superar una adicción. Todo el proceso puede durar varios años.
Los reconocerás por sus frutos. ¿Recogemos uvas de los espinos o higos de los abrojos? Asimismo, todo buen árbol da buenos frutos, pero el árbol corrupto da malos frutos. (Mateo 7:16-20)
Jesús les dijo: ¿No ven todo esto? En verdad os digo que no quedará aquí piedra sobre piedra que no sea derribada. (Mateo 24:2)