Los administradores de TransicionEstructural no se responsabilizan de las opiniones vertidas por los usuarios del foro. Cada usuario asume la responsabilidad de los comentarios publicados.
0 Usuarios y 19 Visitantes están viendo este tema.
https://www.vozpopuli.com/economia-y-finanzas/botin-plan-vivienda-jovenes-reino-unido_0_1356165356.htmlCitarAna Botín importa de Reino Unido su plan estrella para la vivienda de los jovenesLa presidenta del Banco Santander propone hipotecas al 95% para los jóvenes con garantías del Estado de hasta un 20%
Ana Botín importa de Reino Unido su plan estrella para la vivienda de los jovenesLa presidenta del Banco Santander propone hipotecas al 95% para los jóvenes con garantías del Estado de hasta un 20%
¿Qué hemos hecho mal? Me refiero a las generaciones mayores. Los jóvenes bastante tienen con lo que les estamos dejando.Realmente el problema no es de ahora. También lo hicimos mal hace 30 y 40 años.Lo peor, creo yo, fue no darnos cuenta de la naturaleza real del Sistema Político en el cual vivimos. Simplemente nos creímos el mito, el relato tramposo, y nos fiamos. Craso error que no podíamos cometer en Dictadura alguna porque entonces conocíamos perfectamente la realidad. No engañaban mientras que éstos son maestros.Pero por debajo de este error hay otros dos problemas muy poco banales.El primero es un Discernimiento Deficiente que nos perpetúa, voluntaria o involuntariamente, en la inopia.El segundo es peor: nos hemos hecho muy Débiles de Carácter.En ambos casos estos dos procesos fundamentales, Discernimiento y Carácter, se han Obstaculizado a fondo y se ha hecho lo imposible por degradarlos. Eso se ve claramente en la película «La deuda», cuando un criminal de guerra Nazi, Dieter Vogel, es capturado por el Mossad, y dice a sus interrogadores:“¿ Por qué crees que fue tan fácil exterminaros, David? Sois muy débiles”https://www.youtube.com/watch?v=H-OzoC_lJWgAmbas debilidades tienen remedio. No es fácil, pero sí son remediables.Más abajo traigo un pequeño problema de discernimiento que me ha sucedido durante la Prisión Domiciliaria. Lo digo tal cual --Prisión Domiciliaria" porque he aprendido que nunca se puede usar la semántica de los verdugos. Explico lo de verdugo: Sánchez, no contento con esta asombrosa y nada inocente mortandad de mayores, sigue a toda velocidad con su programa de Muerte Protocolizada. No tuvo tiempo para avisarnos de lo que venía pero si lo tuvo para todo lo que le interesaba como cumplir cada etapa del proceso parlamentario de esa Ley que --independientemente de lo que cada uno de nosotros digamos-- va permitir al Estado decidir por nosotros en función de nuestros parámetros vitales cada vez que a partir de cierta edad entremos en un hospital público. Igualito que hace 14 años en Móstoles y ahora mismo durante el Covid 19.Pero al grano: Un amigo biólogo docente me explicaba ayer tarde que el Objetivo de nuestra «cuarentena» que ya va para «CIEN Días de Prisión Domiciliaria con Toque de Queda» no es impedir el contagio.No, señor, explicó: El objetivo es ayudar a que este contagio se produzca a un ritmo manejable por el sistema hospitalario y permita asimilar psicológicamente la mortandad que trae enfocarlo tarde y mal.Esto explicaría por qué en toda Europa las cuarentenas fueron desde el primer día mucho más moderadas y la gente ha podido siempre salir a hacer ejercicio una o dos veces al día. Muchos países ya empezaron el colegio de nuevo. Pero lo que no explica es por qué nuestra «cuarentena» ha sido, de largo, la más dura de Europa.Quizás esta sea la razón por la cual los “expertos” del gobierno deben ser secretos. Ningún experto serio se avendría a decir justo lo contrario de sus equivalentes europeos. ¿Por qué nuestros expertos son tan “diferentes”? Son posturas que definen una vida profesional.En consecuencia vamos a tener un larguísimo proceso de contagio –y de destrucción económica– hasta que se alcance aquel 70% de contagiados al que aludió Frau Merkel hace ya tres meses. La última muestra del Ministerio dio un 5% de la población que ha sido contagiada –media nacional–. Luego falta nada menos que un 65% y hoy tenemos un 95% de la población no contagiada.Yo no pienso que estemos gobernados por ineptos aunque la evidencia ya sea abrumadora.Simplemente creo que sus objetivos no son los nuestros y que el Tandem Bolivariano está interesado en un Proceso Excepcional Muy Largo. De hecho es lo que busca Sánchez obsesivamente y lo dice Iglesias en este video.https://www.eldiestro.es/2020/04/video-pablo-iglesias-te-estremecera-dara-miedo/ResponderA ver ahora que hacen Inés Arrimadas e Iñigo Urkullu con sus votos. Esquerra ya ha dicho que no.Saludos
¿Qué hemos hecho mal? Me refiero a las generaciones mayores. Los jóvenes bastante tienen con lo que les estamos dejando.
Los bancos centrales están cada día asumiendo más riesgos en los mercados. El Banco de Japón lleva la delantera y compra sin ningún rubor acciones de su Bolsa; mientras tanto, la Reserva Federal (Fed) estadounidense anunció al inicio de esta crisis que adquiriría bonos sin grado de inversión, es decir, los de mayor riesgo (high yield), y el Banco Central Europeo (BCE) ya se ha mostrado abierto a hacerlo próximamente ante la gravedad de la crisis económica. Por lo pronto, ya ha aceptado por vez primera los bonos de alto riesgo como garantía (colateral) para dar liquidez a la banca y Christine Lagarde reitera una y otra vez estar dispuesta a todo lo necesario para afrontar la crisis, en respuesta a las críticas del Constitucional alemán al programa de compras de deuda.Un paso aún más allá en la asunción de riesgo, la compra de acciones por parte de los bancos centrales, no le suena descabellada a los analistas. El en su día criticado modelo japonés de intervención en su mercado de bonos fue luego replicado por la Fed y el BCE a raíz de la crisis financiera de 2008. Tampoco se ven con buenos ojos sus compras sin ningún disimulo en las Bolsas, pero puede que, como ocurriera con los bonos, sea solo una cuestión de tiempo. Así lo cree el experto de la gestora Jupiter AM Ariel Bezalel: “No sería descartable que podamos ver a la Fed saliendo al mercado a comprar acciones, como, de hecho, el Banco de Japón lleva tiempo haciendo. Mantenemos desde hace tiempo que los mercados desarrollados terminarán siguiendo la senda económica trazada por Japón”, explica.Un reciente estudio de Bank of America apunta también a la posibilidad de que la Fed tome partido en el mercado de acciones. “El estímulo monetario no tiene precedentes, ya que la Reserva Federal creó el Servicio de Crédito Corporativo del Mercado Secundario (SMCCF) y prometió comprar ETF de bonos corporativos, incluidos los de alto rendimiento de EE UU”. Y agrega: “Si bien el BCE puede hacerse eco de la Reserva Federal al proporcionar un apoyo explícito a los bonos de más riesgo, es poco probable que esto se extienda a las acciones dado que las más capitalizadas ya han rebotado agresivamente desde los mínimos de marzo”.Pero según añaden en Bank of America, los altos multiplicadores de las acciones estadounidenses son una señal de que los inversores “están apostando por una recesión corta, o por la compra de acciones de la Fed, creyendo que los fundamentales de las empresas no importan . Es probable que la Fed considere esas compras en Bolsa si se ve presionada por nuevos derrumbes de los índices”.Las líneas rojasDomingo García Coto, director del Servicio de Estudios de Bolsas y Mercados Españoles (BME), recuerda que los bancos centrales están explorando nuevas vías en la política monetaria. De comprar deuda, pasaron a adquirir bonos corporativos con grado de inversión, y ahora están entrando en el terreno de los bonos high yield. “El tema es muy delicado. Comprar Bolsa por parte de los bancos centrales supondría reducir la aversión al riesgo de los inversores, y crear un suelo, un colchón que redujera la volatilidad. Ahora bien, esta creación de dinero debe estar controlada y no se puede perder la confianza en las autoridades monetarias. Si se pierde esa confianza, el dinero creado no tiene valor, y es una frontera muy sutil que no se debe cruzar”, apunta García Coto.A pesar de que los mercados de deuda llevan años intervenidos con un comprador final como el BCE y cuya estrategia ha podido crear una burbuja en estos activos –ahí están los tipos negativos–, la posibilidad de comprar Bolsa sí sería muy cuestionada en la zona euro y crearía una fuerte y previsible oposición política. Una voz crítica es la de Juan Carlos Ureta, presidente y fundador de Renta 4 Banco, que considera que los bancos centrales se crearon para hacer la política monetaria, cuidar de su estabilidad y asegurar la supervisión financiera y bancaria, y no para invertir en la Bolsa.“Estas compras chocan con una economía liberal, distorsionando la asignación de recursos cuyo mecanismo es el precio”. Y comenta: “Tiene sentido la compra de deuda como elemento de intervención de la política monetaria, inyectando liquidez al mercado. Considero que la compra de bonos corporativos tampoco debería ser función de los bancos centrales”. Ureta marca, asimismo, una diferencia con pasadas crisis bancarias donde los distintos Gobiernos con la ayuda de los bancos centrales pueden intervenir con el fin de garantizar la estabilidad financiera de un país. El caso más reciente es el de Bankia.El responsable de inversión de UBS en España, Roberto Scholtes, ve improbable que la Fed o el BCE compren acciones, ya que esta medida “no sirve para la política monetaria”. Pero, además, considera que a efectos de liquidez, no hace falta: “El mercado de crédito [bonos] se rompió durante esta crisis, pero las Bolsas lograron mantener la liquidez. Las intervenciones en los mercados de bonos tienen más sentido en Estados Unidos, mientras que en Europa la financiación empresarial sigue siendo mayoritariamente bancaria”, concluye.
Después de que las Bolsas tocaran suelo el pasado marzo ante la virulencia del impacto económico del Covid-19, mercados bursátiles e indicadores macroeconómicos han tomado caminos divergentes. Mientras la sangría económica se ha hecho más y más evidente en las últimas semanas, confirmando que la crisis actual no va a ser comparable a nada sucedido antes en tiempos de paz, la Bolsa ha llegado a recuperar más del 20% desde esos mínimos de marzo. Tal recuperación bursátil ha sido muy dispar, con índices como el Ibex sin despegar apenas y otros como el Nasdaq estadounidense que ya casi apuntan a entrar en positivo en el año.Ante remontadas superiores al 20% en el S&P surge la pregunta inevitable de si Wall Street, la guía para el conjunto de Bolsas mundiales, está pecando de optimismo cuando el número de trabajadores que ha solicitado el paro en Estados Unidos alcanza ya los 37 millones solo en siete semanas y cuando el propio presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, se ha encargado de recordar esta semana la gravedad de la situación. Su afirmación de que la actual crisis es nada menos que la peor desde la Segunda Guerra Mundial provocó este miércoles una leve sacudida bursátil de la que Wall Street ya casi se ha repuesto pero que, como poco, invita a la cautela.Los gestores no descartan que la Bolsa pueda volver a derrumbarse a los mínimos de marzo, aunque es un escenario que consideran de forma generalizada muy improbable. Queda por delante sin embargo el trago amargo de encajar el agujero negro que se espera para los resultados y el PIB del segundo trimestre, que arrojará derrumbes de actividad sin precedentes. Las caídas del PIB previstas para el conjunto del año apuntan a superar el doble dígito en países como Italia, España o Francia, para los que Goldman Sachs acaba de revisar estimaciones. Ahora prevé un derrumbe del PIB de 2020 de entre el 13% y el 14% en estos países, con caídas en el segundo trimestre que superarán el 16% en España e Italia y serán del 15% en Francia y del 14% en Alemania.“Los brutales descensos del PIB en base interanual de cifras, por ejemplo, de entre el 15% y el 20%, serán lógicamente temporales. Los mercados son capaces de mirar más allá de las nubes del corto plazo y son conscientes de que los niveles de actividad empezarán a recuperarse en el tercer trimestre. La incógnita más importante es cuál será el grado de la recuperación, no la dirección de la tendencia”, asegura Yves Bonzon, director de inversiones de Julius Baer. Mirar para adelante incluso cuando se espera, como auguran en la firma suiza, que los beneficios del S&P 500 caigan un 37% en el segundo trimestre y un 21% en el conjunto del año. “Con el riesgo de posibles revisiones”, advierten.Un regreso a los mínimos de marzo es improbable aunque sí se esperan nuevas caídasRiesgo de decepción“Una vuelta a los mínimos de marzo es posible pero bastante improbable”, señala David Lafferty, estratega jefe de mercados globales de Natixis IM. “El mercado está ignorando ampliamente los resultados del primer y segundo trimestre y poniendo el foco directamente en la segunda mitad del año y en 2021. El problema es que el S&P sigue sin estar barato dado el deterioro en los beneficios que se avecina”. Lafferty apunta también a un problema obvio: el riesgo de decepción entre los inversores cuando, llegada la reapertura de los negocios tras el confinamiento, la actividad no regrese ni mucho menos al cien por cien.“Las últimas subidas de muchos índices no obedecen a la realidad. La Bolsa está absolutamente anestesiada por los bancos centrales”, afirma Ricardo Gil, responsable de asignación de activos de Trea Asset Management. Los derrumbes bursátiles que se sucedían día sí y día también a la vista del efecto arrollador del coronavirus no cesaron hasta que el BCE y la Reserva Federal aceleraron al máximo sus medidas de estímulo, hasta el punto de anunciar compras ilimitadas de deuda en el caso de la Fed.Para Gil, ese compromiso de los bancos centrales en garantizar la estabilidad financiera será clave para no regresar a los mínimos de marzo y “para que las Bolsas no vayan a descontar en toda su magnitud el derrumbe económico”. Las compras de deuda corporativa son de hecho, según explica Gil, una suerte de cortafuegos para la renta variable puesto que si no se amplían en exceso los diferenciales de crédito y se mueven en un rango de estabilidad, queda conjurado el riesgo de impago de la deuda. “Podríamos ver una caída de la Bolsa de entre el 5% y el 10% pero con el diferencial de crédito estable”, añade.La Fed y el BCE pusieron un suelo a la caída bursátil con su intervención decidida“La probabilidad de volver a los mínimos de marzo se ha reducido pero se esperan más estímulos monetarios”, recuerda Ángel Olea, director de inversiones de Abante. Los bancos centrales han asegurado un mundo de liquidez infinita pero ello no va a impedir sin embargo que muchas compañías, pese a todo, dejen de ser solventes ante el derrumbe de sus negocios. Eso explica otro de los grandes movimientos bursátiles de las últimas semanas y que está detrás de las fuertes subidas de algunos índices: la búsqueda de negocios que puedan salir fortalecidos de la actual situación y que en un entorno de grandes nubarrones, ofrezcan visibilidad. Así, las subidas registradas por el Nasdaq o el S&P han estado pilotadas indudablemente por las tecnológicas y el sector de la salud, los grandes ganadores de la situación actual.Defensivos frente a cíclicosPara Chris Iggo, director de inversiones de Axa IM, lo sucedido en la Bolsa estadounidense en las últimas semanas sí refleja la realidad, puesto que los sectores con peor comportamiento son la distribución, las aerolíneas, las hoteleras e inmobiliarias, todos ellos directamente azotados por la parálisis de actividad. Por el contrario, los sectores más alcistas son los que han canalizado el reverso de la situación de confinamiento generalizado: servicios de telecomunicaciones e internet, de alimentación y de ocio y entretenimiento online. Iggo puntualiza además que la gran parte de empleos en Estados Unidos se concentra en los sectores de educación, ocio y comercio, que no tienen gran peso en el mercado bursátil.Y apunta un dato que da una idea en todo caso de la magnitud del golpe que el Covid-19 está provocando este año en Wall Street. “El S&P ha perdido 2,5 billones de dólares de capitalización bursátil desde el inicio de la crisis. Para este año calculamos que la economía estadounidense vaya a retroceder en 900.000 millones de dólares”, explica.En Europa, sin contar con gigantes tecnológicos como Amazon o Alphabet, sector de la tecnología disfruta de alzas superiores al 20% desde los mínimos de marzo, al igual que el de salud. Para Citi sin embargo, aún es demasiado pronto para inclinar la balanza hacia los cícliclos* y renunciar a los valores defensivos, a pesar de los precios de derribo a los que cotizan sectores como el bancario. Prevé de hecho que el beneficio por acción en Europa descienda alrededor del 55% este año, una caída que se ampliará al 70% en las compañías cíclicas, ligadas al curso de la economía, y que se reducirá sin embargo al 15% para las defensivas.Sin apenas peso de valores tecnológicos o farmacéuticos, la Bolsa española sigue muy rezagada frente al resto de índices. “La renta variable española sale muy mal parada. No podemos pensar que llegado el 30 de junio va ser coser y cantar. La vacuna puede tardar mucho y entonces las Bolsas sufrirán algo más”, explica Ignacio Cantos, director de inversiones de atlCapital. Esta firma, como tantas en las últimas semanas, ha elevado el peso en su cartera de la Bolsa estadounidense. En la ardua cuenta atrás hacia la recuperación, por ahora la Bolsa de Wall Street y la economía de Estados Unidos le llevan ventaja a Europa.
Cita de: Derby en Mayo 19, 2020, 08:47:20 amhttps://www.vozpopuli.com/economia-y-finanzas/botin-plan-vivienda-jovenes-reino-unido_0_1356165356.htmlCitarAna Botín importa de Reino Unido su plan estrella para la vivienda de los jovenesLa presidenta del Banco Santander propone hipotecas al 95% para los jóvenes con garantías del Estado de hasta un 20%Hay algunas cosas buenas en el Reino Unido. Pero la política de vivienda desde Thatcher no es una de ellas. Es peor que la nacional, que ya es difícil. Trataron de solucionar un problema de restricción del suelo por intereses políticos (los baby boomers no votan a partidos que dejan edificar en los cinturones verdes alrededor de las ciudades) con un incremento de la demanda con esa subvención estatal del depósito. Resultado: aumento de precios y alimentar la peor pisitofilia de Europa. El sistema anterior de council housing en alquiler, que era más o menos lo que proponemos aquí, lo destruyeron Thatcher y Blair.
A propósito de las Bolsas...¿Terminarán los bancos centrales comprando Bolsa?El modelo del Banco de Japón de adquirir renta variable podría ser imitado por EE UUCitarLos bancos centrales están cada día asumiendo más riesgos en los mercados. El Banco de Japón lleva la delantera y compra sin ningún rubor acciones de su Bolsa; mientras tanto, la Reserva Federal (Fed) estadounidense anunció al inicio de esta crisis que adquiriría bonos sin grado de inversión, es decir, los de mayor riesgo (high yield), y el Banco Central Europeo (BCE) ya se ha mostrado abierto a hacerlo próximamente ante la gravedad de la crisis económica. Por lo pronto, ya ha aceptado por vez primera los bonos de alto riesgo como garantía (colateral) para dar liquidez a la banca y Christine Lagarde reitera una y otra vez estar dispuesta a todo lo necesario para afrontar la crisis, en respuesta a las críticas del Constitucional alemán al programa de compras de deuda.Un paso aún más allá en la asunción de riesgo, la compra de acciones por parte de los bancos centrales, no le suena descabellada a los analistas. El en su día criticado modelo japonés de intervención en su mercado de bonos fue luego replicado por la Fed y el BCE a raíz de la crisis financiera de 2008. Tampoco se ven con buenos ojos sus compras sin ningún disimulo en las Bolsas, pero puede que, como ocurriera con los bonos, sea solo una cuestión de tiempo. Así lo cree el experto de la gestora Jupiter AM Ariel Bezalel: “No sería descartable que podamos ver a la Fed saliendo al mercado a comprar acciones, como, de hecho, el Banco de Japón lleva tiempo haciendo. Mantenemos desde hace tiempo que los mercados desarrollados terminarán siguiendo la senda económica trazada por Japón”, explica.Un reciente estudio de Bank of America apunta también a la posibilidad de que la Fed tome partido en el mercado de acciones. “El estímulo monetario no tiene precedentes, ya que la Reserva Federal creó el Servicio de Crédito Corporativo del Mercado Secundario (SMCCF) y prometió comprar ETF de bonos corporativos, incluidos los de alto rendimiento de EE UU”. Y agrega: “Si bien el BCE puede hacerse eco de la Reserva Federal al proporcionar un apoyo explícito a los bonos de más riesgo, es poco probable que esto se extienda a las acciones dado que las más capitalizadas ya han rebotado agresivamente desde los mínimos de marzo”.Pero según añaden en Bank of America, los altos multiplicadores de las acciones estadounidenses son una señal de que los inversores “están apostando por una recesión corta, o por la compra de acciones de la Fed, creyendo que los fundamentales de las empresas no importan . Es probable que la Fed considere esas compras en Bolsa si se ve presionada por nuevos derrumbes de los índices”.Las líneas rojasDomingo García Coto, director del Servicio de Estudios de Bolsas y Mercados Españoles (BME), recuerda que los bancos centrales están explorando nuevas vías en la política monetaria. De comprar deuda, pasaron a adquirir bonos corporativos con grado de inversión, y ahora están entrando en el terreno de los bonos high yield. “El tema es muy delicado. Comprar Bolsa por parte de los bancos centrales supondría reducir la aversión al riesgo de los inversores, y crear un suelo, un colchón que redujera la volatilidad. Ahora bien, esta creación de dinero debe estar controlada y no se puede perder la confianza en las autoridades monetarias. Si se pierde esa confianza, el dinero creado no tiene valor, y es una frontera muy sutil que no se debe cruzar”, apunta García Coto.A pesar de que los mercados de deuda llevan años intervenidos con un comprador final como el BCE y cuya estrategia ha podido crear una burbuja en estos activos –ahí están los tipos negativos–, la posibilidad de comprar Bolsa sí sería muy cuestionada en la zona euro y crearía una fuerte y previsible oposición política. Una voz crítica es la de Juan Carlos Ureta, presidente y fundador de Renta 4 Banco, que considera que los bancos centrales se crearon para hacer la política monetaria, cuidar de su estabilidad y asegurar la supervisión financiera y bancaria, y no para invertir en la Bolsa.“Estas compras chocan con una economía liberal, distorsionando la asignación de recursos cuyo mecanismo es el precio”. Y comenta: “Tiene sentido la compra de deuda como elemento de intervención de la política monetaria, inyectando liquidez al mercado. Considero que la compra de bonos corporativos tampoco debería ser función de los bancos centrales”. Ureta marca, asimismo, una diferencia con pasadas crisis bancarias donde los distintos Gobiernos con la ayuda de los bancos centrales pueden intervenir con el fin de garantizar la estabilidad financiera de un país. El caso más reciente es el de Bankia.El responsable de inversión de UBS en España, Roberto Scholtes, ve improbable que la Fed o el BCE compren acciones, ya que esta medida “no sirve para la política monetaria”. Pero, además, considera que a efectos de liquidez, no hace falta: “El mercado de crédito [bonos] se rompió durante esta crisis, pero las Bolsas lograron mantener la liquidez. Las intervenciones en los mercados de bonos tienen más sentido en Estados Unidos, mientras que en Europa la financiación empresarial sigue siendo mayoritariamente bancaria”, concluye.https://cincodias.elpais.com/cincodias/2020/05/15/mercados/1589578519_915283.htmlOtra más:La Bolsa intenta ir por delante de la pandemiaCitarDespués de que las Bolsas tocaran suelo el pasado marzo ante la virulencia del impacto económico del Covid-19, mercados bursátiles e indicadores macroeconómicos han tomado caminos divergentes. Mientras la sangría económica se ha hecho más y más evidente en las últimas semanas, confirmando que la crisis actual no va a ser comparable a nada sucedido antes en tiempos de paz, la Bolsa ha llegado a recuperar más del 20% desde esos mínimos de marzo. Tal recuperación bursátil ha sido muy dispar, con índices como el Ibex sin despegar apenas y otros como el Nasdaq estadounidense que ya casi apuntan a entrar en positivo en el año.Ante remontadas superiores al 20% en el S&P surge la pregunta inevitable de si Wall Street, la guía para el conjunto de Bolsas mundiales, está pecando de optimismo cuando el número de trabajadores que ha solicitado el paro en Estados Unidos alcanza ya los 37 millones solo en siete semanas y cuando el propio presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, se ha encargado de recordar esta semana la gravedad de la situación. Su afirmación de que la actual crisis es nada menos que la peor desde la Segunda Guerra Mundial provocó este miércoles una leve sacudida bursátil de la que Wall Street ya casi se ha repuesto pero que, como poco, invita a la cautela.Los gestores no descartan que la Bolsa pueda volver a derrumbarse a los mínimos de marzo, aunque es un escenario que consideran de forma generalizada muy improbable. Queda por delante sin embargo el trago amargo de encajar el agujero negro que se espera para los resultados y el PIB del segundo trimestre, que arrojará derrumbes de actividad sin precedentes. Las caídas del PIB previstas para el conjunto del año apuntan a superar el doble dígito en países como Italia, España o Francia, para los que Goldman Sachs acaba de revisar estimaciones. Ahora prevé un derrumbe del PIB de 2020 de entre el 13% y el 14% en estos países, con caídas en el segundo trimestre que superarán el 16% en España e Italia y serán del 15% en Francia y del 14% en Alemania.“Los brutales descensos del PIB en base interanual de cifras, por ejemplo, de entre el 15% y el 20%, serán lógicamente temporales. Los mercados son capaces de mirar más allá de las nubes del corto plazo y son conscientes de que los niveles de actividad empezarán a recuperarse en el tercer trimestre. La incógnita más importante es cuál será el grado de la recuperación, no la dirección de la tendencia”, asegura Yves Bonzon, director de inversiones de Julius Baer. Mirar para adelante incluso cuando se espera, como auguran en la firma suiza, que los beneficios del S&P 500 caigan un 37% en el segundo trimestre y un 21% en el conjunto del año. “Con el riesgo de posibles revisiones”, advierten.Un regreso a los mínimos de marzo es improbable aunque sí se esperan nuevas caídasRiesgo de decepción“Una vuelta a los mínimos de marzo es posible pero bastante improbable”, señala David Lafferty, estratega jefe de mercados globales de Natixis IM. “El mercado está ignorando ampliamente los resultados del primer y segundo trimestre y poniendo el foco directamente en la segunda mitad del año y en 2021. El problema es que el S&P sigue sin estar barato dado el deterioro en los beneficios que se avecina”. Lafferty apunta también a un problema obvio: el riesgo de decepción entre los inversores cuando, llegada la reapertura de los negocios tras el confinamiento, la actividad no regrese ni mucho menos al cien por cien.“Las últimas subidas de muchos índices no obedecen a la realidad. La Bolsa está absolutamente anestesiada por los bancos centrales”, afirma Ricardo Gil, responsable de asignación de activos de Trea Asset Management. Los derrumbes bursátiles que se sucedían día sí y día también a la vista del efecto arrollador del coronavirus no cesaron hasta que el BCE y la Reserva Federal aceleraron al máximo sus medidas de estímulo, hasta el punto de anunciar compras ilimitadas de deuda en el caso de la Fed.Para Gil, ese compromiso de los bancos centrales en garantizar la estabilidad financiera será clave para no regresar a los mínimos de marzo y “para que las Bolsas no vayan a descontar en toda su magnitud el derrumbe económico”. Las compras de deuda corporativa son de hecho, según explica Gil, una suerte de cortafuegos para la renta variable puesto que si no se amplían en exceso los diferenciales de crédito y se mueven en un rango de estabilidad, queda conjurado el riesgo de impago de la deuda. “Podríamos ver una caída de la Bolsa de entre el 5% y el 10% pero con el diferencial de crédito estable”, añade.La Fed y el BCE pusieron un suelo a la caída bursátil con su intervención decidida“La probabilidad de volver a los mínimos de marzo se ha reducido pero se esperan más estímulos monetarios”, recuerda Ángel Olea, director de inversiones de Abante. Los bancos centrales han asegurado un mundo de liquidez infinita pero ello no va a impedir sin embargo que muchas compañías, pese a todo, dejen de ser solventes ante el derrumbe de sus negocios. Eso explica otro de los grandes movimientos bursátiles de las últimas semanas y que está detrás de las fuertes subidas de algunos índices: la búsqueda de negocios que puedan salir fortalecidos de la actual situación y que en un entorno de grandes nubarrones, ofrezcan visibilidad. Así, las subidas registradas por el Nasdaq o el S&P han estado pilotadas indudablemente por las tecnológicas y el sector de la salud, los grandes ganadores de la situación actual.Defensivos frente a cíclicosPara Chris Iggo, director de inversiones de Axa IM, lo sucedido en la Bolsa estadounidense en las últimas semanas sí refleja la realidad, puesto que los sectores con peor comportamiento son la distribución, las aerolíneas, las hoteleras e inmobiliarias, todos ellos directamente azotados por la parálisis de actividad. Por el contrario, los sectores más alcistas son los que han canalizado el reverso de la situación de confinamiento generalizado: servicios de telecomunicaciones e internet, de alimentación y de ocio y entretenimiento online. Iggo puntualiza además que la gran parte de empleos en Estados Unidos se concentra en los sectores de educación, ocio y comercio, que no tienen gran peso en el mercado bursátil.Y apunta un dato que da una idea en todo caso de la magnitud del golpe que el Covid-19 está provocando este año en Wall Street. “El S&P ha perdido 2,5 billones de dólares de capitalización bursátil desde el inicio de la crisis. Para este año calculamos que la economía estadounidense vaya a retroceder en 900.000 millones de dólares”, explica.En Europa, sin contar con gigantes tecnológicos como Amazon o Alphabet, sector de la tecnología disfruta de alzas superiores al 20% desde los mínimos de marzo, al igual que el de salud. Para Citi sin embargo, aún es demasiado pronto para inclinar la balanza hacia los cícliclos* y renunciar a los valores defensivos, a pesar de los precios de derribo a los que cotizan sectores como el bancario. Prevé de hecho que el beneficio por acción en Europa descienda alrededor del 55% este año, una caída que se ampliará al 70% en las compañías cíclicas, ligadas al curso de la economía, y que se reducirá sin embargo al 15% para las defensivas.Sin apenas peso de valores tecnológicos o farmacéuticos, la Bolsa española sigue muy rezagada frente al resto de índices. “La renta variable española sale muy mal parada. No podemos pensar que llegado el 30 de junio va ser coser y cantar. La vacuna puede tardar mucho y entonces las Bolsas sufrirán algo más”, explica Ignacio Cantos, director de inversiones de atlCapital. Esta firma, como tantas en las últimas semanas, ha elevado el peso en su cartera de la Bolsa estadounidense. En la ardua cuenta atrás hacia la recuperación, por ahora la Bolsa de Wall Street y la economía de Estados Unidos le llevan ventaja a Europa.https://cincodias.elpais.com/cincodias/2020/05/15/mercados/1589557344_972250.htmlNegritas de un servidor* https://fepix.com/index.php/es/bolsa/196-que-son-las-acciones-defensivas
Sabadell -11,7%y resto sector bancario guano rojo
More than 8% of U.S. mortgages now in forbearance: MBA weekly survey
El Gobierno envía a las Cortes el primer proyecto de Ley de Cambio Climático y Transición Energética para alcanzar la neutralidad de emisiones a más tardar en 2050icono barra herramientas[…]https://www.miteco.gob.es/es/prensa/ultimas-noticias/el-gobierno-envia-a-las-cortes-el-primer-proyecto-de-ley-de-cambio-climatico-y-transicion-energetica-para-alcanzar-la-neutralidad-de-emisiones-a/tcm:30-509229#prettyPhoto
[...][pg.8/14] LA REHABILITACIÓN DE EDIFICIOS, CLAVE EN LA EFICIENCIA ENERGÉTICAEn cuanto a la eficiencia energética, las principales medidas se concentran en el ámbito de la rehabilitación energética de edificios, otro segmento clave en la reactivación económica que, además, es un pilar de la lucha contra la pobreza energética. De acuerdo con el proyecto, el Gobierno promoverá y facilitará el uso eficiente de la energía y el uso de fuentes renovables en la edificación, alineando la Estrategia a largo plazo para la renovación de edificios con los objetivos de los sucesivos PNIEC. Para atraer recursos hacia las acciones de eficiencia energética, el proyecto amplía hasta 2030, de acuerdo con lo previsto en la nueva Directiva de Eficiencia Energética, el Fondo de Eficiencia Energética, que ha permitido movilizar más de 1.000 millones de euros en los últimos cinco añoshttps://www.miteco.gob.es/es/prensa/200519cminproyectoleycambioclimatico_tcm30-509230.pdf
Nadia Calviño espera apoyos para la última prórroga del estado de alarma e insta a superar el "ruido" sobre el rescateLa vicepresidenta económica del Gobierno, Nadia Calviño, confía en que los partidos políticos den el "empujón final" y apoyen la que se espera sea la última prórroga del estado de alarma, que el Consejo de Ministros aprobará por un mes, e insta a superar el "ruido" sobre una eventual solicitud de rescate para centrarse en un enfoque común europeo para afrontar la crisis del coronavirus,(...)La vicepresidenta de Asuntos Económicos insta también a superar el "ruido" sobre una eventual solicitud de rescate para centrarse en un enfoque común europeo para afrontar la crisis del coronavirus.Fondo de recuperación de le economía europeaEn este sentido ha citado con la propuesta lanzada por Francia y Alemania para la puesta en marcha de un fondo de recuperación de la economía europea de 500.000 millones de euros destinado a los países y los sectores más golpeados por la pandemia de Covid-19 a través únicamente de transferencias presupuestarias. "Se trata de un acuerdo verdaderamente importante porque va muy en la línea de lo que había defendido España e Italia", ha destacado Calviño.Aún "no está todo ganado", pues el resto de países tendrán que opinar sobre el plan de Merkel y Macron y aún falta por conocerse la propuesta que hará la Comisión Europea la próxima semana, pero considera muy importante que los cuatro países principales de la UE estén de acuerdo."Esta propuesta es un paso en muy buena dirección", ha insistido, ya que ofrece "una base mucho mejor" para negociar un verdadero plan de reconstrucción europeo con una lógica de endeudamiento común..Europa busca una "respuesta común a un reto común", ha dicho, por lo que pide "intentar superar todo ese ruido que nos rodea y que no es constructivo", en referencia a un posible rescate.Sobre la necesidad de realizar reformas apuntada el pasado lunes por el gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, Calviño ha asegurado que se empezarán a hacer planes a medio plazo una vez que España pase a la siguiente "fase" económica.
Antonio Garamendi: "España tendrá que pedir dinero a la UE lo antes posible"Sostiene que, de pedir un rescate ahora, los mercados lo van a entender El presidente de CEOE mantiene que, una vez conocidas las cuentas del Estado, "si no hay dinero, España tendrá que pedir el rescate" a la Unión Europea. En opinión de Antonio Garamendi, de vernos en la necesidad de pedirlo, "es más fácil pedir el dinero antes que después". No obstante, el máximo representante de la patronal de empresarios defiende que, una vez hecha la radiografía de la situación económica, y un estudio de los gastos extra de la administración, la solución no pasa por subir impuestos, "porque volveríamos a una política errática y eso contraería la economía".El representante de la patronal, a su paso por las Conversaciones 2020 de elEconomista -esta vez con el patrocinio de Mascarillas Bejar-, ha justificado el impacto de un rescate ya que, "en estos momentos, todos los mercados van a entender fenomenal lo que tengamos que gastar por la situación que tenemos. Y yo creo -explica- todo el mundo lo va a admitir. Pero siempre que lo gastemos en temas coyunturales para aguantar esta crisis". "Tenemos que tener presente que -señala-, la prima de riesgo ha subido 100 puntos desde principio de año. Y eso que el BCE nos está comprando el 50% de la deuda. Pero el otro 50% son los mercados, y los mercados lo que quieren ver son señales de que el país se gestiona bien. Y esto es un dato muy importante", argumenta Garamendi para ahondar en la necesidad de mandar un mensaje de confianza al exterior.(...)"En un estado de alarma, lo que no se puede plantear son temas estructurales en estos momentos. No solo es un error, es que no es un momento para un debate de este tipo. Y eso no quita -prosigue- que de aquí a diciembre se organice la renta mínima para que nadie se quede descolgado. Eso es otra historia. Pero insisto -remata-, no nos gustan los reales decretos. Para empezar, porque cuando hay un decreto ley la CEOE tiene capacidad de presentar enmiendas y de intentar por lo menos influir y que te oigan. Mientras que, un Real Decreto, es como un contrato de adhesión, o lo compras o lo dejas", colige.(...)"Lo lógico -explica sobre el funcionamiento y la organización de la Comisión de la Reconstrucción- hubiera sido llevarme a mí. Yo habría hablado en general. Pero luego deberían haber ido los sectores, por ejemplo, el del automóvil. Y cuidado, porque aquí nos encontramos también con el sector auxiliar del automóvil, que son empresones en España. También tendrían que ir los concesionarios. Eso hubiera sido lo normal para entender qué es lo que hay que hacer para reconstruir económicamente el país", determina el presidente de la patronal de empresarios.(...)"Bueno -concluye sobre este punto Garamendi-, vamos a ver qué es lo que es y para qué vale la Comisión. Pero sinceramente, no sé muy bien cómo está enfocada o no. Es verdad que han convocado al presidente de Cepyme, a mí. Y sé que han convocado al presidente del Grupo Mondragón... Los demás, de momento no están nominados", indica.