www.transicionestructural.NET es un nuevo foro, que a partir del 25/06/2012 se ha separado de su homónimo .COM. No se compartirán nuevos mensajes o usuarios a partir de dicho día.
0 Usuarios y 10 Visitantes están viendo este tema.
After the news of CajaSur it got me thinking about my time in Spain from 2004 - 2007. I noticed there were many [/color][/font]DB (Deustche Bank) retail branches all along the Costa Del Sol, even in the smallest of seaside towns such as Los Boliches. These DB branches were offering the same sort of easy credit and mortgage deals to Spanish and foreign property buyers as was CajaSur and many of the other cajas.What makes me think there *may* be some problems for DB's Spanish portfolio is the omission of said exposure in this WSJ article from early May detailing various European banks exposure to what they classified as "weak economies":AT A GLANCE: Europe Bank, Insurer Exposure To Weak EconomiesOkay let's play a game. Look at the below snippet and ask yourself if there is something missing:GERMANY:*Deutsche Bank (DB): Greece very limited, no comment on others.*Deutsche Postbank AG [DPB.XE]: Greece EUR1.3 billion. Portugal EUR50 million, Spain EUR1.2 billion, Ireland EUR350 million, Italy EUR4.7 billion.*Commerzbank [CBK.XE]: Greece EUR3.1 billion, total of EUR26.5 billion public finance exposure to Greece, Ireland, Italy, Portugal and Spain.*Munich Re AG [MUV2.XE]: On March 31, it had exposure of EUR2.5 billion to Ireland, just below EUR5 billion to Italy, EUR2.3 billion to Greece, EUR1.9 billion to Spain, Portugal EUR800 million.*Hannover Re [HNR1.XE]: Greek exposure EUR35 million.*Allianz [ALV.XE]: Greece EUR900 million, Portugal EUR500 million, Spain EUR1.8 billion, Italy EUR7.6 billion.*Hypo Real Estate: Greece EUR7.9 billion, Portugal EUR1.7 billion, Spain EUR2.7 billion, Italy EUR26.5 billion.Alright so Hannover RE also leaves out any of their exposure to Spain or other regions other than Greece, but the interesting thing on the DB omission is the "no comment on others".Of course none of this is evidence that DB could be substantially damaged from Spanish sub-prime mortgage losses, but I know for a fact they were involved in Spain in a big way which makes their "no comment" somewhat enigmatic.Disclosure: No positionsPor si sirve de pista del por qué de la procrastinación ...
Hace unos días, estuve intentado (inútilmente la verdad) buscar cuál era la exposición de los bancos alemanes a algún tipo de producto o crédito concedido al sistema financiero español.
Cita de: Abner en Enero 13, 2012, 18:59:18 pmHace unos días, estuve intentado (inútilmente la verdad) buscar cuál era la exposición de los bancos alemanes a algún tipo de producto o crédito concedido al sistema financiero español.¿Algo de este estilo?....
Abner, creo que los 1,1billones no son de soberana, sino de privada, no?
Inesperadobalón de oxígeno. El ministro de Hacienda,Cristóbal Montoro, ha anunciado que se aplazan a diez años lasdevoluciones de los ayuntamientos y comunidades autónomas al Estado. La medidaintenta favorecer la liquidez y, de paso, evitar su crack financiero. Las liquidacionesnegativas de 2008 y 2009 se elevan a 790 millones de euros.
La recuperación de la deducción por vivienda para todos los contribuyentes aprobada en diciembre por el Ejecutivo de Mariano Rajoy se acompañó de la posibilidad de que las rentas inferiores a 33.000 euros que pagan una hipoteca puedan pedir una rebaja de dos puntos en las retenciones del IRPF que les aplica su empresa.
Ver para creer:http://www.cincodias.com/articulo/economia/rentas-33000-euros-pagan-hipoteca-pueden-rebajar-retencion-irpf/20120113cdscdieco_1/CitarLa recuperación de la deducción por vivienda para todos los contribuyentes aprobada en diciembre por el Ejecutivo de Mariano Rajoy se acompañó de la posibilidad de que las rentas inferiores a 33.000 euros que pagan una hipoteca puedan pedir una rebaja de dos puntos en las retenciones del IRPF que les aplica su empresa.
[...]Nunca menosprecié tanto el poder del slow motion que da haber salido de matrix. Esquivamos las balas, pero a qué desesperante velocidad!!Los pepitos seguro que las ven a velocidad WARP.No veo nada mejor que entre batalla y batalla, sentarse y meditar.[...]Sds.
Los datos han sido recopilados y puestos a disposición del público por la agencia de noticias Bloomberg, que llevó a juicio (y ganó) a la Reserva Federal para tener acceso a estos datos.
En fin, pero presciendo del enfoque y las formas, es cierto que es un problema. Y mientras leia el librito me he ido haciendo una lista mental de toda la gente que conozco y que se ha ido del pais, y de todos aquellos que tienen pensado irse. Hoy un primo mio a Uruguay, sin ir más lejos. Gente joven y preparada, y con ganas de trabajar. Eso es una via de agua en toda regla. Y son gente que, viendo el cariz que toman los acontecimientos, no va a procrear en Hispanistán. Luego no solo es que la castuza nos condene a todos a un presente de mierda con sacrificios inútiles para el pueblo, es que les está inoculando la semilla de la carga insoportable a nuestros hijos. Preveo campañas en 2050 en paises civilizados del tipo adopta a un abuelo español. ellos te necesitan.
REPORTAJE: IDA Y VUELTALa era de la fealdadANTONIO MUÑOZ MOLINA 14/01/2012 Algo más ha ocurrido a lo largo de todos estos años alucinados, los años del delirio que duró tanto y del que no parece que despertemos del todo; algo más, aparte de la sinvergonzonería, del despilfarro, de la arrogancia de los nuevos ricos, de la obsesión por los orígenes, de la creencia alentada por la clase política de que se puede tener todo sin pagar por nada ni responsabilizarse de nada ni agradecer nada. Ahora se abren los ojos, ya sin remedio, y lo que se ve no es solo que de nuevos ricos hemos pasado a nuevos pobres, y que es a los débiles a los que les toca pagar las calamidades desatadas por los poderosos. Lo que se ve, además, es que en todos estos años, sin que nos diéramos mucha cuenta, nos ha ido rodeando e invadiendo un océano de fealdad, un océano que ocupa desde los paisajes que parecían más deshabitados o remotos hasta el corazón de las ciudades. Es una fealdad pública y también privada; una fealdad a escalas inmensas y en tamaños reducidos y no por eso menos viles; se la ve caminando por las calles y cuando se viaja en coche o en tren por esos alrededores cancerosos que nunca terminan y que incluyen siempre centros comerciales, polígonos cimarrones en mitad de páramos, barriadas compactas con torres de muchos pisos que nunca llegarán a ser habitados o urbanizaciones de adosados que se pierden en la lejanía, franquicias de comida basura, prostíbulos con letreros de neón que parpadean débilmente en los mismos secanos y bajo el mismo sol arcaico que tanto emocionaba a los estetas de la generación del 98.La fealdad de iniciativa privada y de pequeña escala lo asalta a uno desde la puerta de un bar del que sale una musiquilla de máquina tragaperras y un olor a fritangas, desde una de esas tiendas o bazares chinos, desde un atroz salón de juegos junto al que algún jubilado se agrava la bronquitis crónica poco antes de aplastar la colilla en el suelo y del volver adentro para dilapidar la pensión escuchando el Baile de los pajaritos. Es asombroso que tratándose de una fealdad en la que intervienen tantos empeños individuales el efecto general sea tan unitario: el mismo en una calle del centro de Madrid y en una del extrarradio, en el sur o en el norte, en nacionalidades históricas dotadas de una identidad cultural que se remonta al paleolítico o a las cruzadas y en esas otras que se han ido apañando por imitación en las últimas décadas. Justo en ese tiempo en el que más recursos se han invertido en recuperar identidades es cuando se ha logrado una unidad más perfecta: la estética española de lo desaliñado y lo pavoroso.Casi no se puede decir, porque otro de los muchos logros de esta época ha sido el fomento de orgullos colectivos tan propensos al agravio que la menor crítica conduce al linchamiento, al anatema y la excomunión. Pero en muchas ocasiones, en una capital o en un pueblo de mil habitantes, lo que sorprende, lo que casi estremece, es el grado y las variedades de fealdad que uno va encontrando. Pero a ver quién es el valiente que da un nombre. La arquitectura popular ha sido arrasada casi en todas partes. Y lo que queda muchas veces es un monumento histórico rodeado de horrores, aislado del ecosistema en el que tuvo sentido. Queda el monumento, mal que bien, quedan las extensiones de bloques de pisos con cierres de carpintería metálica y portales de falso mármol, algunos de ellos aderezados con fantasías posmodernas de los años ochenta, quedan los pavimentos de granito y las calles sin aceras y con bolardos o chirimbolos y bancos públicos sin respaldo que a los arqueólogos del porvenir les servirán para fechar la era Zapatero de principios del siglo XXI.Y quedan otros dos rasgos fundamentales de dicha era: los llamados edificios emblemáticos o icónicos y la escultura de rotonda de tráfico. Ahora es bastante cómico leer las críticas tajantes, aunque retrospectivas, que empiezan a publicarse sobre las extravagancias arquitectónicas de estos últimos veinte años. Pero hasta que Llàtzer Moix publicó en 2010 Arquitectura milagrosa el debate público sobre tales delirios no había existido (o si existía entre los arquitectos no llegaba a nosotros, la plebe no experta y no autorizada a juzgar), y nadie prestaba mucha atención a detalles tan poco relevantes como los costes de la construcción y los del mantenimiento. La era Calatrava también les resolverá problemas de datación a los arqueólogos del futuro lejano, y además les alegrará las excavaciones con hallazgos abundantes, aunque en ocasiones difíciles de interpretar.Pero quizás el misterio arqueológico definitivo del próximo milenio serán las rotondas o glorietas de tráfico: el Stonehenge y el Machu Picchu y la isla de Pascua de la gran era de la fealdad pública española. Quizás en Kazajistán o en Mongolia o en alguna otra república postsoviética de Asia Central se encontrarán monumentos semejantes. Aproximarse por carretera a cualquier ciudad española es un horror más o menos idéntico en el que no hay más variaciones que el tamaño de las esculturas en las glorietas de tráfico y quizás el perfil distante de la aguja de una catedral. Las hay abstractas y las hay figurativas. Casi todas ellas exaltan algún fundamento de la gloria local. Algunas recuerdan el gusto escultórico de aquellos dos antiguos amigos de Occidente, Sadam Husein y Muamar el Gadafi. Algún historiador del arte con inclinaciones depravadas podría hacer una tesis sobre ese fenómeno estético.Estoy impaciente porque se termine y se inaugure la que será probablemente la obra maestra de la escultura de glorieta. Ahora mismo las fotos la muestran todavía rodeada de andamios, en medio de un páramo, pero no puede faltar mucho para que esté terminada. Recibirá a los viajeros que lleguen al aeropuerto de Castellón, que fue inaugurado con gran pompa hace casi un año por las autoridades autonómicas y provinciales, pero en el que sigue sin aterrizar ni despegar ningún avión. La escultura, obra del artista Ripollés, es, según la descripción del periódico, "un coloso de metal de 20 toneladas". Representa, en palabras del propio artista, "una figura a la que le saldrá de la cabeza un avión; ese es el germen y el esperma del nacimiento de la obra". Parece ser que se trata de un homenaje algo alegórico al expresidente de la Diputación Provincial de Castellón, de cuyo cerebro brotó, por citar al artista, el germen y el esperma de este aeropuerto.Recordar que la escultura costará 300.000 euros es sin duda una mezquindad. Quién le pone precio al arte. Y al fin y al cabo ese gasto es una nadería en un aeropuerto que ha costado 150 millones de euros, y que costará mantener 8 millones al año. En el caso no improbable de que ningún avión llegue a aterrizar en él, los vecinos de la zona podrán recrearse paseando bucólicamente por las pistas y admirando en silencio la escultura del artista Ripollés. Quizás dentro de mil años el coloso castellonense de 20 toneladas será una de las pocas reliquias visibles de nuestra era de la fealdad.Arquitectura milagrosa. Hazañas de los arquitectos estrella en la España del Guggenheim. Llàtzer Moix. Anagrama. Barcelona, 2010. 288 páginas. 18 euros. antoniomuñozmolina.es