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Yo no lo llamaría troll, más bien cizañero
Ahora resulta que uno de los fundadores del foro es troll
Lo que está sucediendo es que nos están sometiendo a un proceso de *saqueo* CALCADO, a los procesos neoliberales que practicaron con latinoamérica con la excusa de la "crisis de la deuda" desde los 70, 80 y 90
(click to show/hide)Cita de: burbunova en Septiembre 11, 2014, 13:02:49 pmCita de: obcad en Septiembre 10, 2014, 22:17:10 pmDos conceptos interesantes que han salido: ignorancia e inconsciencia. No son lo mismo, como es obvio.La ignorancia es aquello que no puedo alegar ante la ley como eximente ("el desconocimiento de la ley... etc."). No puedo alegar ignorancia ante la ley porque la ignorancia depende de mí. O sea, está en mi mano resolverla, aprendiendo o informándome.Sin embargo la inconsciencia no depende de uno, puesto que supone un estado de evolución superior al que en realidad se tiene, al que no se puede acceder a voluntad, sino por un catalizador -de lo contrario lo haríamos siempre. La experiencia de la vida, la interacción, es el mecanismo natural para aumentar la consciencia. Los seres que no interaccionan, se estancan (interactuar sólo con tu "ambiente" es equivalente a no hacerlo). [...]Cuando se dice que "El hombre es libre de elegir" en realidad debería decirse que, en el mejor de los casos, algunos hombres o mujeres logran serlo en algunos ámbitos y sólo puntualmente. Lo cual rebaja mucho el maximalismo de la afirmación inicial.[...]Si a todo esto le añadimos el hecho de que como cualquier ser vivo tenemos una naturaleza de la que no podemos escapar, la grandilocuente afirmación de que "el hombre es libre para elegir el bien y el mal" es como mínimo extremadamente revisable.Supongamos que yo intento explicarle a alguien que vive de exprimir inquilinos las externalidades negativas que causa su actividad. O a cualquiera de esos millones de funcis de medio pelo, pongamos que una Charo o un celador de hospital - ambos tan funcis como un magistrado de la Audiencia Nacional -, que no tiene lógica que disponga de unos ingresos de por vida y que se actualizan con la inflación, todo ello con independencia de factores como su rendimiento laboral o la situación económica del estado.Y supongamos que en vez de hacerlo yo, es otra persona quien lo hace, y muy bien: con profusión de datos, claridad expositiva y elocuencia.Los resultados son previsibles: no es que no acepten siquiera una mínima reducción de sus ingresos, es que de entrada se negarán a aceptar que se cuestione su legal forma de ganar dinero.Para mí, el mero hecho de negarse cuestionar - que no dar la razón - tu modo de vida cuando se enfrenta a críticas razonadas y basadas en datos, es elegir hacerse el mal; y, en no pocos casos, es también elegir hacer el mal a terceros.Estoy muy de acuerdo, precisamente porque esa persona, una vez que conoce las consecuencias o externalidades, es libre de hacer la elección. Pero antes no lo era, da igual si debería haberlo sido, no lo era. Hizo falta que su consciencia aumentase (que alguien se la hiciera aumentar, en realidad), para poder estar en posición de elegir. Esta es la clave. Una vez puede elegir, es responsable de su decisión.Yo creo que esto no se puede obviar. Por eso muchas personas son responsables de su historia personal (por ejemplo estar endeudados hasta los ojos) pero no se les puede culpar de ser libres de crear un problema sistémico (como por ejemplo un exceso en el ratio de funcionarios sobre población activa).
Cita de: obcad en Septiembre 10, 2014, 22:17:10 pmDos conceptos interesantes que han salido: ignorancia e inconsciencia. No son lo mismo, como es obvio.La ignorancia es aquello que no puedo alegar ante la ley como eximente ("el desconocimiento de la ley... etc."). No puedo alegar ignorancia ante la ley porque la ignorancia depende de mí. O sea, está en mi mano resolverla, aprendiendo o informándome.Sin embargo la inconsciencia no depende de uno, puesto que supone un estado de evolución superior al que en realidad se tiene, al que no se puede acceder a voluntad, sino por un catalizador -de lo contrario lo haríamos siempre. La experiencia de la vida, la interacción, es el mecanismo natural para aumentar la consciencia. Los seres que no interaccionan, se estancan (interactuar sólo con tu "ambiente" es equivalente a no hacerlo). [...]Cuando se dice que "El hombre es libre de elegir" en realidad debería decirse que, en el mejor de los casos, algunos hombres o mujeres logran serlo en algunos ámbitos y sólo puntualmente. Lo cual rebaja mucho el maximalismo de la afirmación inicial.[...]Si a todo esto le añadimos el hecho de que como cualquier ser vivo tenemos una naturaleza de la que no podemos escapar, la grandilocuente afirmación de que "el hombre es libre para elegir el bien y el mal" es como mínimo extremadamente revisable.Supongamos que yo intento explicarle a alguien que vive de exprimir inquilinos las externalidades negativas que causa su actividad. O a cualquiera de esos millones de funcis de medio pelo, pongamos que una Charo o un celador de hospital - ambos tan funcis como un magistrado de la Audiencia Nacional -, que no tiene lógica que disponga de unos ingresos de por vida y que se actualizan con la inflación, todo ello con independencia de factores como su rendimiento laboral o la situación económica del estado.Y supongamos que en vez de hacerlo yo, es otra persona quien lo hace, y muy bien: con profusión de datos, claridad expositiva y elocuencia.Los resultados son previsibles: no es que no acepten siquiera una mínima reducción de sus ingresos, es que de entrada se negarán a aceptar que se cuestione su legal forma de ganar dinero.Para mí, el mero hecho de negarse cuestionar - que no dar la razón - tu modo de vida cuando se enfrenta a críticas razonadas y basadas en datos, es elegir hacerse el mal; y, en no pocos casos, es también elegir hacer el mal a terceros.
Dos conceptos interesantes que han salido: ignorancia e inconsciencia. No son lo mismo, como es obvio.La ignorancia es aquello que no puedo alegar ante la ley como eximente ("el desconocimiento de la ley... etc."). No puedo alegar ignorancia ante la ley porque la ignorancia depende de mí. O sea, está en mi mano resolverla, aprendiendo o informándome.Sin embargo la inconsciencia no depende de uno, puesto que supone un estado de evolución superior al que en realidad se tiene, al que no se puede acceder a voluntad, sino por un catalizador -de lo contrario lo haríamos siempre. La experiencia de la vida, la interacción, es el mecanismo natural para aumentar la consciencia. Los seres que no interaccionan, se estancan (interactuar sólo con tu "ambiente" es equivalente a no hacerlo). [...]Cuando se dice que "El hombre es libre de elegir" en realidad debería decirse que, en el mejor de los casos, algunos hombres o mujeres logran serlo en algunos ámbitos y sólo puntualmente. Lo cual rebaja mucho el maximalismo de la afirmación inicial.[...]Si a todo esto le añadimos el hecho de que como cualquier ser vivo tenemos una naturaleza de la que no podemos escapar, la grandilocuente afirmación de que "el hombre es libre para elegir el bien y el mal" es como mínimo extremadamente revisable.
(Reanudo con el último post del hilo, antes del troll-flooding )...
Cita de: saturno en Septiembre 13, 2014, 14:30:21 pm(Reanudo con el último post del hilo, antes del troll-flooding )...Todo esto estaba puesto en mi post anterior, en el que digo que la libertad, y su reverso tenebroso, la responsabiidad, están determinadas -al menos- por tres cosas: la ignorancia, la inconsciencia y la impotencia. Creo que es a esto último a lo que usted se refiere, por tanto de acuerdo. Pero aclaraba que hay niveles de responsabilidad: cuando un número excesivo de personas en una sociedad contraen deudas excesivas, a cada una de ellas se les puede atribuir la responsabilidad de su deuda individual, que podrían haber esquivado leyendo bien la letra pequeña de la hipoteca (ignorancia no exime). Pero no se les puede responsabilizar del problema sistémico generado porque demasiada gente, durante demasiado tiempo, contrayese hipotecas de demasiada cuantía, cuyo colateral global no cubre.De esto último, la responsabilidad sólo se puede atribuir a quien fuera conocedor, consciente y compentente para actuar sobre el problema sistémico. Por eso es justo y necesario que cada pepito cargue con su hipoteca, sin historias de culpar al cha-cha-cha, ni bramar contra las "élites", o las "castas". Esa responsabilidad -pagar su hipoteca o perder el pisito- es suya exclusivamente, y ¡atención!, en la inmensa mayoría de los casos sólo se trata de dinero. De aceptar que has perdido, aceptando previmente que apostabas.
Programas generadores de texto aleatoriohttp://www.cosassencillas.com/articulos/8-generadores-de-texto-aleatorio-lorem-ipsumNo sabía muy bien dónde ponerlo, y me he dicho, éste es un buen sitio.[ Por cierto, me pregunto qué les pasaba a los que no se presentaban voluntarios (y a sus familias.) ]
fueron persuadidos por incentivos perversos: uno de los más importantes, en términos sociológicos, era la fantasía instalada en el imaginario colectivo de lo militar como signo de prestigio y afirmación personal, y una concepción romántico-aristocrática de la guerra.
Hoy sería impensable movilizar a una generación entera a una guerra de esas características, porque no existe una base cultural que permita cosa semejante.